El planteamiento de reducir la llegada de vuelos de 52 a 43 por hora en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, implica un reto logístico para reasignar los slots y horarios de embarque y desembarque lo que generará dificultades y pérdidas, alertaron expertos aéreos.
Tras la versión de que con la llegada del invierno la 4T pretende reducir el número de llegadas al AICM, Fernando Gómez Suárez, experto en economía de aviación calculó que intentan frenar 30% las llegadas, pero no han considerado que se afectarán líneas aéreas internacionales, a los propios comercios que operan en el aeropuerto y por supuesto a usuarios ya que como se sabe muchos vuelos son comprados con meses de anticipación.
“Eso implica pérdida de ingresos por disminución de operaciones aéreas a los servicios aeronáuticos aeroportuarios, al TUA y también en la reducción de ventas a los locales comerciales que podrán verse afectados por esta disminución en el número de pasajeros”.
Gómez Suárez, analista de la industria aérea, advirtió que las aerolíneas extranjeras podrían verse afectadas e incluso pueden emitir reclamos, sí es una buena oportunidad para eliminar la saturación del aeropuerto capitalino, cuyo problema viene de décadas.
“Esta es una buena oportunidad, pero hace falta también considerar los aspectos como la utilización no nada más del AIFA, sino también de los aeropuertos de Toluca, Querétaro y Puebla”, entre otros.
Por su parte, el capitán José Suárez Valdez, vocero de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA), criticó que de concretarse la medida será una muy mala decisión de la cual no se entienden los argumentos.
“Te puedo decir como piloto activo que no hay una saturación real en el cielo, el problemas es dentro del aeropuerto, pero incluso ahí hay espacios para mejorar la infraestructura; invertir, pero no han invertido nada, no se han visto más espacios, más terminales”.
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Agregó que la saturación no está en el cielo, está en la terminal porque las autoridades no han hecho nada para crecer la infraestructura. El piloto aviador señaló que está decisión afecta a la industria, afecta a los pasajeros que pueden tomar un vuelo, “reducir nueve operaciones, nueve slots poniendo por ejemplo un avión pequeño de 99 pasajeros, estamos hablando que son 491 pasajeros por hora, estamos hablando de más de 14 mil pasajeros afectados diarios”.
Acusó que esta decisión de llevarse a cabo va a desproteger a los trabajadores del aeropuerto porque al final de cuentas, “no vamos a tener las mismas operaciones… lo que va a suceder es que vas a tener que despedir gente”.
Dijo que los afectados colaterales serán los negocios dentro de la terminal aérea ya que habrá menos usuarios que gasten en un café, en un refrigerio afectando la entrada de dinero.
“El gobierno se está disparando en el pie, son cosas que tiene que pensar a todas luces”