El Partido Movimiento Ciudadano (MC) llegará fracturado a las elecciones en el 2024, muy a pesar de las reiteradas declaraciones de Dante Delgado de que “competirán solos’’.

Hasta el momento, así parece que será.

Pero Dante hace mal sus cálculos.

El veracruzano cree que el MC lo seguirá en bola en todas las decisiones que tome y no será así.

El próximo año se disputarán más de 2,000 cargos de elección popular, entre ellos la Presidencia, nueve gubernaturas (incluida la CDMX), 500 diputaciones federales, 128 senadurías y se renovarán los congresos de 30 entidades federativas.

Evidentemente el MC no podrá cubrir todas las candidaturas porque, por muy autónomo que se diga, lo cierto es que su membresía no le alcanzará.

Y menos porque el grupo mayoritario dentro del partido, el Grupo Jalisco, encabezado por Enrique Alfaro, pactará con el Frente Amplio por México más tarde que temprano.

Lo hará porque si, como Dante, decidiera ir solo a la elección, Morena tendría más del 90% de posibilidades de arrebatarles ese bastión.

¿Con cuántos cuadros de peso (figuras ciudadanas o políticos que migraron al MC) cuenta Dante para dar la pelea en 2024?

La apuesta de Dante es bastante arriesgada, pues se juega su permanencia como partido político.

En este momento, el “peso’’ del MC debe estar entre los 6 y 7 puntos porcentuales de las preferencias electorales y, aunque algunas encuestas presagian que pueden llegar al 11% en el 2024, tendrían que cuadrar muchos escenarios para que eso ocurriera.

Si lo piensa lograr solo con un candidato presidencial, ya puede irle apostando en contra.

El MC requiere de candidatos a gobernador y a legisladores fuertes que le puedan sumar votos a la hora del conteo para llegar al 3% de la votación requerida para mantener el registro como partido nacional.

Si ocurre que aumenta su porcentaje de participación en el Congreso, Dante podría ser considerado un genio, en caso contrario, habrá más de uno que le recrimine haber jugado solo no solo en perjuicio de su propio partido si no de la oposición completa, porque dos o tres puntos que pudieran obtener en la votación general podrían ser la diferencia entre otro sexenio con lo mismo o un cambio de modelo.

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Luis Donaldo Colosio Riojas había expresado a Dante Delgado, hace poco más de un año, que no quería ser candidato presidencial y que lo bajaran de ese barco.

Pero como el nombre de Colosio Jr. vende, lo siguieron promoviendo como alternativa.

En realidad, el alcalde de Monterrey quiere ser senador y así se lo externó al dueño del MC.

La posición de Colosio Riojas es bastante sensata y madura, a diferencia de su locuaz compañero y compadre, Samuel García, quien se dice listo para gobernar al país cuando ni a Nuevo León ha podido responder.

Porque por mucho que venda que Tesla vendrá al estado, otra cosa no tiene que vender.

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Por si estaban con el pendiente, el Frente Amplio por México definirá sus candidatos a las gubernaturas, incluida la CDMX, con el método más sencillo: será candidato quien sea más competitivo(a).

Así que ya no habrá comités ciudadanos ni nada por el estilo, sino encuestas entre los aspirantes para determinar quiénes serán sus candidatos.

Eso será en diciembre y enero.