Con diferentes actividades lúdicas a lo largo del año, el Tecnológico de Monterrey busca promover estilos de vida saludables y prevenir conductas de riesgo en su comunidad estudiantil.
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Las actividades forman parte del Programa de Prevención de Bienestar Estudiantil del que Jesús Onofre Corona es coordinador.
En entrevista, el también psicoanalista destacó que dicho programa se encuentra en todos los campus del país y hace énfasis en las siete esferas del bienestar, entre ellas social, personal, financiera, ocupacional y espiritual.
“Creemos que apostar por la salud mental tiene que ver con una preocupación de situaciones que están pasando los jóvenes, que no obedecen a la realidad del Tec de Monterrey sino a la realidad del país, del mundo”.
El especialista indicó además que aunque el principal objetivo son los estudiantes, también hay actividades para toda la comunidad, incluso un área de vinculación con padres de familia.
Como parte del programa también se brinda un seguimiento “puntual” a aquellos alumnos que presentan conductas de riesgo, como consumo de alcohol o drogas, o crisis de ansiedad, que se dispararon tras el fin del confinamiento por la COVID-19.
“Si tú no tienes tus emociones bien trabajadas o tu aspecto emocional medianamente trabajado, nada de lo que hagas va a salir a lo mejor como tú quieras (…) Trabajar en el aspecto mental debe ser una de las prioridades que tristemente no lo es para todo el mundo”.
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En Ciudad de México el Programa beneficia a cerca de siete mil alumnos de preparatoria, universidad y posgrado.
RM