El Atlético de Madrid remontó para ganar 3-2 al Feyenoord neerlandés este miércoles en el Metropolitano madrileño, poniéndose provisionalmente líder del grupo E de la Champions.
Foto: AFP | El Atlético terminó pidiendo la hora pero consiguió defender su primera victoria en Champions  

El Atlético de Madrid remontó para ganar 3-2 al Feyenoord neerlandés este miércoles en el Metropolitano madrileño, poniéndose provisionalmente líder del grupo E de la Champions League.

Los holandeses se adelantaron hasta en dos ocasiones con un gol en propia puerta de Mario Hermoso (7) y otro de David Hancko (34), pero un doblete de Álvaro Morata (13, 48) y un gol de Antoine Griezmann (45+4) dieron la vuelta al encuentro.

El equipo rojiblanco enderezó el rumbo tras su empate inicial contra la Lazio para ponerse al frente de la llave con un punto de ventaja sobre el Feyenoord, a la espera de lo que ocurra este miércoles en el duelo entre el Celtic y la Lazio.

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“Todos tienen grandes equipos, esto es la Champions, hay que sufrir para ganar, hemos apretado, hemos sabido sufrir y tres puntos importantísimos”, dijo Morata a Movistar+ tras el partido.

“Sobre todo estoy decepcionado porque no conseguimos puntos y solamente son seis partidos”, afirmó el técnico del Feyenoord Arne Slot, para el que “si dejamos de lado los goles, algo que es imposible, el partido sí que se ha desarrollado de la manera que nosotros queríamos”.

Por otro lado, el delantero mexicano Santiago Giménez no fue requerido para este partido.

El partido se le puso cuesta arriba desde el inicio al Atlético en el estreno europeo en su feudo esta temporada cuando un despeje del portero Jan Oblak rebotó en Hermoso, que coló el balón en su propia portería (7).

Los rojiblancos sufrían para llegar a la portería contraria ante un Feyenoord con una defensa de cinco, obligando a los locales a buscar las entradas por los costados.

Morata al rescate

Los neerlandeses dejaron la iniciativa al Atlético, que cerca de cuarto de hora igualó al aprovechar Morata un mal corte en el área y recoger un balón para marcar un gol, validado por el videoarbitraje (13).

El tanto sirvió para tranquilizar al Atlético que llegaba más, pero no encontraba acierto en los últimos metros frente a un Feyenoord vertical que ponía balones largos y salía por velocidad al contraataque.

Los neerlandeses volvieron a adelantarse cuando Hancko remató un saque de falta, Jan Oblak rechazó, pero el balón le volvió a caer al eslovaco del Feyenoord que hizo el 2-1 (34).

El tanto hizo mucho daño al Atlético, que sufrió sus peores minutos de la primera parte aguantando los ataques de un rival animado.

El Atlético parecía irse al descanso por detrás en el marcador, pero entonces Griezmann fue el más listo en un barullo en el área para marcar el 2-2 de chilena en el descuento (45+4).

Nada más reanudarse el encuentro, el argentino Nahuel Molina puso un gran balón al área desde la derecha donde apareció Morata para empujar con la punta del pie el balón al fondo de las mallas neerlandesas (48).

Sufrimiento final

Este décimo gol en diez partidos oficiales del delantero español permitió a los madrileños, que acabarían temblando hasta el final, lograr su primera victoria en Champions desde septiembre de 2022.

Morata, que acabó siendo elegido mejor jugador del encuentro, terminó siendo el héroe de su equipo junto al portero Jan Oblak, que en la segunda parte sostuvo a un Atlético que se fue metiendo cada vez más atrás.

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“En el segundo tiempo controlamos bastante bien el partido hasta el minuto 25 y a partir de ahí sufrimos”, dijo Simeone tras el partido.

El equipo local acabó achicando balones ante el empuje del Feyenoord, que se encontró con las paradas de Oblak.

“Oblak tuvo acciones importantes que nos generaron seguridad y nos llevamos una victoria importante”, aseguró Simeone.

El Atlético terminó pidiendo la hora pero consiguió defender su primera victoria en Champions de la temporada para hacer bueno el empate inicial en Roma.

EAM