Por: Juan Manuel Contreras
Yucatán es un estado privilegiado para la observación de las aves migratorias, porque en sus costas donde suelen descansar. No obstante, la expansión urbana ha depredado algunos de los litorales en donde solían reposar, por lo que el Día Mundial de las Aves Migratorias es una invitación a reflexionar..
Gilberto González Kuk, técnico en el programa de Aves Urbanas de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), recordó que en el estado hay 400 especies de aves y 550 en la Península, de las cuales la mitad son migratorias.
Estas especies son importantes para el ecosistema, explicó, y viajan grandes distancias, algunas de ellas como colibríes y aves pequeñas pueden viajar hasta 2 mil kilómetros en un solo vuelo. En su mayoría provienen de Estados Unidos y Canadá.
Este año la organización Environment of América y el Acuerdo para la Conservación de las Aves Migratorias y Especies Silvestres decretaron que el tema para la efeméride fuera el agua.
“El agua ha tenido muchas problemáticas para las personas, pero también para las aves migratorias porque ellas buscan estas áreas para sus descansos, y lo que ha estado pasando es que en sus viajes se encuentran cada vez con menos cuerpos de agua, o que ya no tienen las condiciones óptimas para su descanso”.