En México, una de cada ocho mujeres tiene un diagnóstico de cáncer de mama por lo que, a 28 años de haberse instituido la primera campaña de concientización sobre esta enfermedad, todavía existe un reto enorme de concretizar sobre el cuidado, sobre todo entre las comunidades más vulnerables, refirieron especialistas en el tema.
“Las campañas sí han alertado, pero sigue habiendo mucho tabú en cuanto al ‘tócate’ y al miedo de enfrentar un diagnóstico”, refirió Alma Ortiz Pellón, subdirectora de la Asociación Mexicana de la Lucha contra el Cáncer (AMLCC); ante lo cual informó a 24 HORAS que a partir del próximo año la campaña de concientización que hace en el mes de diciembre se ampliará a todo el año.
“En el caso nuestro hemos tomado la decisión de que a partir del año entrante la campaña ‘Que se nos haga costumbre’ se tiene que convertir en una estrategia de tiempo completo, tenemos que hablar todo el año y empezar a desmitificar muchos temas, el primero que cáncer no es sinónimo de muerte y va a depender de lo que uno haga como mujer”, declaró Ortiz Pellón.
Reconoció que estas campañas sí han alertado, pero no es suficiente, “nos sigue faltando un pedazo importante de camino y ese pedazo importante es generar una conciencia sobre que el cáncer es una enfermedad crónica que hoy tiene mejores posibilidades de vida gracias a la innovación terapéutica independientemente del estadio en el que estén”.
Ante las innovaciones en los tratamientos, actualmente si el cáncer se detecta oportunamente las posibilidades de control y curación es alto: “Hay una diferencia entre llegar oportunamente a llegar tardíamente; sin embargo, sigue habiendo un efecto desafortunadamente de esa llegada tarde”, por lo que destacó la necesidad de empezar a convencer a los gobiernos locales de generar campañas de manera permanente.
En tanto, el Dr. Ernesto Sánchez Forgach, médico especialista en Cirugía Oncológica del Centro Médico ABC, señaló que las campañas que iniciaron en 1995 han derivado en cambios en la política de Salud y en la institución de gabinetes de detección de cáncer de mama en todo el país.
Refirió que, el porcentaje de cáncer temprano que se observa en una institución privada es arriba de 75%, “es muy raro detectar en etapas avanzadas”.
Sin embargo, informó que en una institución de especialidad de salud pública como el Instituto Nacional de Cancerología, “sigue habiendo más cáncer en etapa avanzada que en etapa temprana, en una relación de 65% etapa avanzada contra 35% en etapa temprana. Y a nivel rural hay siete casos avanzados por tres tempranos”.
El especialista consideró que este tema tiene que ver con educación, de ahí la necesidad de instrumentar por más tiempo y en todo el territorio campañas de concientización.
Al respecto, Alma Ortiz coincidió en que las poblaciones más vulnerables “es a las que peor les va, en esto y en todo y, tiene que ver con acceso a la atención, a la información a la educación, a la infraestructura y a los especialistas.
“Es toda una combinación en la que estamos faltando, estamos faltando desde todos los lugares posibles como Secretaría de Salud, como organizaciones sociales, médicos y todos los que jugamos en el ámbito de la salud”.
Lamentó que no exista material al alcance de las poblaciones con lenguas originarias. Insistió que las campañas deben ampliarse y no limitarse a un mes porque se tienen menos posibilidades de que la información llegue a los sectores vulnerables.
El doctor Sánchez Forgach informó que, entre los factores de riesgo que tienen las mujeres para ser diagnosticadas con cáncer de mama están la obesidad, menstruación temprana, abuso de hormonas, embarazos después de los 30 años o no embarazo, vida sedentaria, alcoholismo, tabaquismo y la genética.
LEG