Miles de mujeres islandesas fueron partícipes de la primera huelga general en 48 años, con el fin de erradicar la violencia de género y ponerle fin a la brecha salarial que viven en la actualidad, en una jornada de movilización en todo el país.
Las protestas tuvieron lugar en decenas de ciudades como Akureyri, isla de Hrísey, y Reikiavik, capital de Islandia; donde cientos personas se solidarizaron con la causa y salieron a las calles a alzar la voz en pos de la igualdad y el respeto, donde la asistencia aproximada era de alrededor de 10 mil personas, según datos de la organización del evento.
Dicha huelga también repercutió en los servicios públicos como centros escolares, hospitales (excepto urgencias), bibliotecas y transportes; ya que se les alentó a las mujeres y personas de genero no binario a no realizar ninguna actividad laboral y doméstica durante todo el día, lo que podría provocar la paralización del país islandés en gran medida al menos durante unas horas.
Te puede interesar: Museo del Pérgamo cerrará sus puertas hasta 2037
A la huelga también se sumó la primera ministra del país Katrin Jakobsdottir, junto con algunos miembros de su gabinete como la ministra de Justicia, Gudrun Hafsteinsdottir, y la de Cultura, Lilja Alfredsdottir.
El Gobierno de Islandia añadió que daría una dotación de 10 millones de coronas (poco más de 70.000 dólares) a proyectos en materia de igualdad, según su propia página web.
La primera dama, Eliza Reid, resaltó que el objetivo del paro de labores, es demostrar la importancia de la contribución de mujeres y personas no binarias a la sociedad.
Te puede interesar: Discuten México, EU y Canadá estrategia vs trata de personas de cara al Mundial
A pesar de que Islandia se caracteriza por ser un país donde predomina la igualdad, las mujeres islandesas reciben salarios menores en un 21 por ciento que los de los hombres, mientras que se estima que un 40 por ciento de las mujeres experimente violencia y abuso sexual, según distintos medios de comunicación.
AEST