La semana pasada el Consejo de Seguridad de la ONU rechazó dos proyectos de resolución sobre el conflicto israelo-palestino, elaborados por Rusia y Brasil.
Por un lado, el proyecto propuesto por Brasil fue rechazado por no aceptar que Israel se defendiera, por lo tanto, obtuvo 1 voto en contra por parte de Estados Unidos, uno de los cinco miembros con poder de veto, 12 votos a favor y 2 abstenciones por parte de Rusia y China. Mientras que el proyecto ruso recibió los votos de sólo cinco países.
Cabe mencionar que para que un texto sea aceptado y adoptado se requiere la aprobación de al menos 9 de los 15 miembros del Consejo, sin el veto de ninguno de los cinco miembros permanentes (Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia y China).
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El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá de nuevo este miércoles para volver a votar por dos nuevos proyectos de resolución sobre la guerra entre Israel y Hamás elaborados por Rusia y Estados Unidos.
Esta vez, el nuevo proyecto ruso pide de nuevo “el establecimiento inmediato de un alto el fuego humanitario duradero y plenamente respetado”, y condena “toda violencia y hostilidades contra civiles”. Pero a diferencia del texto presentado previamente este “condena los abominables ataques” del movimiento islamista palestino en Israel el 7 de octubre.
Por otro lado, el proyecto de resolución presentado por Estados Unidos afirma “el derecho de todos los Estados a la autodefensa”, no sólo de Israel. También pide “pausas humanitarias”. Sin embargo, el día de ayer el embajador ruso, Vassili Nebenzia, declaró ante la ONU que no podía apoyar el proyecto estadounidense por no hacer un llamamiento al alto el fuego.
“Si se rechazan los dos proyectos“, declaró una fuente diplomática, “los 10 miembros no permanentes del Consejo podrían presentar su propio texto”.
DRS