¿Cómo explicar la psicodelia hoy en día? Tal vez tus padres habrán escuchado a The Doors, Pink Floyd y si nos vamos a algo más local, Chac Mool. Pero hoy en día pocos son los proyectos que hacen música de este tipo.
En México existen exponentes que pasan del rock psicodélico, krautrock, shoegaze y otros derivados. Del lado independiente están Margaritas Podridas, Lorelle Meets The Obsolete, Supersilverhaze pero también existe la escena comercial como Daniel Quién.
Este último recientemente compartió su álbum Magic Experience Band en el que plasma sus pensamientos en donde combina sonidos espaciales, riffs, bajos, sintetizadores, en fin, todo un universo. Además de dar el mensaje de ser auténtico y hacer un lado la idea de sonar igual a proyectos de otros países.
“Lo que pasa con Daniel Quién es que cada 10 segundos hay un elemento nuevo y al juntarlo se hace una sinergia para que ninguna canción tenga un descanso fijo.
“Hacer este álbum es contracultural es hacer lo contrario a buscar los segundos de gancho en TikTok sino que cada segundo sea el gancho. Eso combinado con un concepto es complicado de cuadrar hasta matemáticamente”, mencionó Daniel en entrevista con 24 HORAS.
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Y es que de acuerdo al cantante, en alguna partes se tuvo que hacer uso de las matemáticas para empatar el sonido de una guitarra y un bajo. Para el cantante de apenas 27 años este proyecto implicó un reto ya que se arriesgó al no relacionarlo con lo que hoy es tendencia.
“Al principio sentía temor cuando estás grabando algo así. Cuando haces algo que es difícil debes estar consciente que esto deberá abrirse camino solo. Ese mismo temor era el que te motiva para hacerlo con el corazón porque hay mucho reto y posibilidades de fallar”, recordó.
Daniel Quién inició su carrera musical en 2017 en medio de la fiebre por “Despacito” y recuerda cuando tocaba en cafeterías, subía su música a Soundcloud y también vendía churros a lado de su papá.
“Me sentí triste de compartir mi contemporaneidad con canciones sin sustancia como ‘Despacito’ y sus derivados. ¡Cero miedo! Esas son canciones sin sustancia.
“Actualmente ver el corrido y la canción regional mexicana en el mundo me hace sentir orgullo de ser contemporáneo de ese momento tan solido y cabrón. Uno también está acá haciéndolo desde su trinchera haciendo lo suyo pero en una época más interesante a diferencia de cuando inicié en donde me sentía desolado”, agregó.
En medio de los conflictos que ocurren en algunas partes del mundo, Daniel es consciente de que las ambiciones de uno afectan a los otros. Además de que aprovecha las emociones que siente para plasmarlas en su música.
“Es un desperdicio el tener emociones tan fuertes y no usarlas en la vida diaria. Justo la música es la puerta que me ha abierto el saber que quiero contar cosas, expresar lo que hay dentro de mi cabeza. A veces la conversación no termina de cuadrarme pero hasta que lo plasmo cobra sentido. Yo vine aquí para esto.
“Yo opino que todas las personas estamos a merced de gente con ambiciones que desconocemos. Que todo lo que sucede a nivel país o individual está basado en ambiciones de otro. Sin querer respondemos a los caprichos de las personas. O te quejas toda la vida y te vuelves un anarquista extremo o aprendes a estar en el juego, a aprender y compartir. Para mi siempre ha sido determinante ver que el mundo funciona por medio de ambiciones”, reflexionó.
Uno de los objetivos de Daniel es el crear un sonido mexicano alejado de influencias extranjeras.
“La psicodelia moderna está dominada por Kevin Parker (Tame Impala). Los artistas del mainstream que se meten en la psicodelia tienen la influencia de Parker. Ese fue uno de mis retos en mi nuevo disco, evitar ese sonido”, mencionó.
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Finalmente, Daniel Quién cierra este 2023 con uno de sus proyectos más ambiciosos y se prepara para presentarlo en vivo en distintos recintos del país.
“Estamos planeando muchas cosas con sonidos distintos. Es algo que me alegra mucho. Cuando la raza empieza a escuchar este disco sienten la esencia de mi proyecto.
“Lo cierro con orgullo y que simplemente el haber hecho este trabajo me dejó abiertas las posibilidades. Yo tenía mucho que decir y cada aspecto de la producción es una emoción plasmada. Este trabajo no solo es exponer lo que siento sino que aceptarme a mi mismo.
“El Magic es ese amor odio. Amo mi obra pero ahí plasmé todos mis pensamientos oscuros y felices que están listos para ser juzgados, criticados y más”.
LDAV