En una operación que generó críticas y preocupación internacional por los pacientes y los miles de desplazados, el Ejército israelí realizó ayer una incursión en el hospital Al Shifa, el más importante de la Franja de Gaza.
Israel afirma que Hamás lo usa para ocultar sus infraestructuras de mando, acusación apoyada por Washington y negada por Hamás.
Según agencias internacionales, las tropas se retiraron del centro al anochecer y tomaron posición a su alrededor.
Decenas de soldados israelíes interrumpieron por la mañana pidiendo que “todos los hombres de 16 años en adelante” salieran “hacia el patio interior para rendirse”.
Los soldados israelíes fueron de habitación en habitación, disparando al aire, en busca de combatientes de Hamás. Unos mil palestinos salieron al patio y algunos fueron desnudados y cateados en busca de armas o explosivos.
Tras la incursión, el Ejército afirmó que encontró “armas y equipos militares” de Hamás en el establecimiento. Además, publicó imágenes de armas, granadas y otros equipos de guerra, asegurando que procedían de su operación en Al Shifa, pero no se pudieron confirmar su veracidad con otras fuentes.
El Ministerio de Salud de Hamás aseguró que en el lugar no hay “armas ni equipos militares” porque “no se autoriza” tenerlas en esos establecimientos.
CONDENAS
Mientras tanto, el Consejo de Seguridad de la ONU logró aprobar una resolución para pedir “pausas humanitarias”.
El texto, adoptado con 12 votos a favor y las abstenciones de Estados Unidos, Rusia y Reino Unido, “insta a pausas y corredores humanitarios amplios y urgentes”, pero la incursión en Al Shifa suscitó condenas internacionales y llamados a proteger a los civiles palestinos.
“La protección de los recién nacidos, los pacientes, el personal médico y todos los civiles debe primar sobre todas las demás cuestiones”, afirmó el responsable de asuntos humanitarios de la ONU, Martin Griffiths.
“No dimos el ‘OK’ a sus operaciones militares en torno al hospital”, declaró John Kirby, portavoz del Consejo Nacional de Seguridad, a la par que Qatar calificó el hecho de “crimen de guerra”.
Según la ONU, dentro de Al Shifa hay unas 2 mil 300 personas en terribles condiciones, con escasos suministros médicos y familias que viven sin casi agua ni comida, entre el olor de cadáveres en descomposición.
NETANYAHU AMENAZA A HAMÁS
“No hay lugar en Gaza al que no llegaremos”, advirtió ayer el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu. “Alcanzaremos y eliminaremos a Hamás y traeremos de regreso a los rehenes”, dijo. “Nos dijeron que no llegaríamos a las afueras de la Ciudad de Gaza y lo hicimos, nos dijeron que no entraríamos a Al Shifa y lo hicimos”, añadió. /24 HORAS