La falta de una ley de seguridad privada y la ausencia de un padrón nacional de prestadores de este tipo de servicios ha generado la producción de autos blindados de manera irregular, la proliferación de empresas fuera de la Ley y abuso de custodios, entre otras irregularidades denunciaron empresarios del sector.
Ante ello, el Consejo Nacional de Seguridad Privada (CNSP), se pronunció por acelerar la aprobación de la nueva Ley Federal de Seguridad Privada que brindará “cancha pareja” y es también un compromiso del presidente Andrés Manuel López Obrador.
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Al respecto, Raúl Sapién Santos, presidente del CNSP, destacó que “dentro del sector de la seguridad privada, existen empresas que cumplen con el marco normativo, capacitan y entrenan a su personal e invierten en infraestructura, nuevas tecnologías y generan protocolos de actuación eficaces”.
Agregó que “as empresas de seguridad privada están obligadas a brindar certeza a sus clientes y a la sociedad, a través de servicios de calidad regulados por las autoridades, toda vez que la seguridad es coadyuvante e impulsora del desarrollo económico de México.
En este contexto, Alejandro Desfassiaux, presidente de Grupo Multisistemas de Seguridad Integral (GMSI), con 40 años en el sector de la seguridad privada, destacó que la principal fortaleza de las empresas en este ramo es el recursos humano, y por ello mantienen un entrenamiento constante a sus más de 14 mil colaboradores.
“Hace 20 años se creó el programa HDS, es decir, personal entrenado en sistema de defensa israelí Krav magá, con alto sentido de espíritu de cuerpo y manejo de tecnología de seguridad.
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Posteriormente, se creó el Cuerpo Especial de Reacción Inmediata, CERI, que cuenta con el entrenamiento HDS, con el diferencial que constituye el equipo táctico armado.
“También cuenta con un Centro Nacional de Monitoreo C5, y en cada filial del país, un C4, lo que posibilita una coordinación y reacción eficaz”, explicó Desfassiaux.
CSAS