Por primera ocasión desde 1917, el presidente de México hará la designación directa de un ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), con ello, Andrés Manuel López Obrador elegirá a cinco ministros del máximo tribunal del país y no tres, como le correspondían ante el esquema de escalonamiento para la elección de ministros.
La falta de acuerdos entre Morena y la oposición ocasionó que las personas propuestas por el primer mandatario en la segunda terna enviada al Senado fueran rechazadas en dos ocasiones durante la madrugada de este jueves, al no alcanzar las dos terceras partes de los votos que requería.
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La presidenta de la Mesa Directiva, Ana Lilia Rivera, informó que este resultado se comunicará al titular del Ejecutivo Federal para que sea él quien decida, de entre las personas propuestas en la última terna, quién será la nueva ministra de la Corte.
La segunda terna se integró por Bertha María Alcalde Luján, Lenia Batres Guadarrama y Eréndira Cruz Villegas Fuentes.
En la primera votación se registraron 29 votos a favor de Alcalde Luján, 33 a favor de Batres Guadarrama; 12 a favor Cruz Villegas Fuentes, uno nulo, y 46 en contra de la terna. En la segunda votación hubo 16 votos a favor de Alcalde Luján, 54 a favor de Batres Guadarrama, dos por Cruz Villegas Fuentes, tres nulos y 46 en contra.
Previamente, en tribuna, Bertha María Alcalde Luján aseguró que, de ocupar el cargo de ministra de la SCJN, lo hará con honradez, autonomía y humanismo, “y utilizaré mi energía y conocimientos técnicos para proteger la Constitución, y seré fiel a mi compromiso irrenunciable con la justicia y el respeto a los derechos de todas las personas”.
En su turno para exponer ante el Pleno, Lenia Batres Guadarrama afirmó que se requiere un Poder Judicial celoso de su función, guardián constitucional y que no invada la esfera de facultades de otros poderes, ya que no corresponde a éste nombrar o destituir a gobernadores, impedir la distribución de libros gratuitos o invalidar leyes cuando no está en duda la inconstitucionalidad de éstas.
“Ya es hora de que el Poder Judicial y la Corte adopten una actuación austera y que cumplan su obligación de impartir justicia pronta y expedita”, advirtió.
En tanto, María Eréndira Cruzvillegas Fuentes defendió que, en caso de ser elegida ministra de la SCJN, su labor estaría encaminada a abrir las puertas para que la justicia “no cueste y no duela”, además de procurar que sea un derecho para todas las personas y no un privilegio para unos cuantos.
KA