Atisbar en las redes sociales de Dante Delgado Rannauro, dirigente nacional del llamado Movimiento Ciudadano (MC), resulta verdaderamente hilarante. El veracruzano ya se creyó el “cuento chino” de que su partido político en realidad representa una tercera vía de cara a la elección presidencial de junio próximo y la verdad es que nada que ver.

Igualmente, el esquirol consentido del presidente López Obrador piensa que va a conectar con el electorado con una ramplona y nada creativa campaña de marketing en la que se presenta como como un capo de la mafia italiana autoproclamándose como un representante y emisario de la “nueva política”.

Y mejor ya ni hablemos del desatino de haber reciclado al ahora adolescente Yuawi López. Cierto, hace seis años los naranjas “pegaron de hit” con los spots en donde utilizaron como ariete publicitario a este simpático chamaco de orígenes wixárikas. Pero ahora, con el forzadisimo slogan de “Arráncate México, Hey!!!” y esos pasadísimos de moda tenis fosforescentes simplemente lucen desangelados y sin punch.

No, Dante, así no va la cosa. Por enésima ocasión te estás equivocando. Nadie con dos dedos de frente se va a tragar la píldora de que un viejo dinosaurio del obsoleto cementerio priista se va a convertir en el adalid de la “nueva política”. Le estás apostando a la amnesia de los potenciales electores y al final te va a salir el tiro por la culata.

Para mala fortuna de las huestes naranjas, estas últimas semanas les han servido para darse cuenta de que una cosa es gastar millones de pesos en redes sociales para vender una ficción y otra muy distinta es lo que ocurre a ras de calle, que es donde se construyen las verdaderas candidaturas y donde se ganan las elecciones. Además, las arenas del reloj se están agotando y todavía no definen a su candidato a la Presidencia de la República y eso ya está obrando en su contra.

…Y por favor, Dante, que no se te ocurra autonombrarte el candidato presidencial por MC, porque en una de esas provocas que hasta pierdan el registro.

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Y como no hay plazo que no se cumpla, por fin en México ya tenemos a la primera ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) elegida por la vía del dedazo presidencial. Se trata de Lenia Batres Guadarrama. Si, la hermana del jefe de Gobierno de la ciudad postizo, Martí Batres Guadarrama. Así las cosas, doña Lenia se sumará a la plagiaria Yasmín Esquivel y a la esposa del contratista consentido, Loretta Ortiz Ahlf, como las tres ministras carnalas que defenderán los intereses obradoristas y de la 4T. ¡Faltaba más!

Sin méritos profesionales y técnicos, olvídense de la preparación y capacitación, la señora Lenia ha sido nombrada para ocupar un puesto durante 15 años. Y con este tipo de perfiles es como el presidente López Obrador piensa infiltrar al último de los órganos autónomos que se ha resistido a los caprichos y designios del tabasqueño.

Ayer jueves por la tarde ya vimos cuál será la tónica con la que va a trabajar la flamante ministra. Llegó a criticar y a denostar, a imponer su muy limitado conocimiento de la ley y de la justicia. Literal, fue como si la hubieran invitado a comer y se puso a hablar pestes de sus anfitriones, de los cocineros y de la comida que le sirvieron.

¡¡¡Terrible!!!

 

X: @Yalessandrini1

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