Dos días después de que muriera en un ataque en Líbano el número dos del movimiento islamista Hamás, que gobierna el estrecho territorio palestino, Israel lanzó ayer nuevos bombardeos intensos en la Franja de Gaza.
Los ataques aéreos machacaron Jan Yunis, en el extremo sur del territorio, una ciudad que está en la diana del ejército israelí desde hace varios días.
El Ministerio de Salud del territorio, gobernado por Hamás desde 2007, dio parte de 125 muertos en 24 horas. Desde el inicio de la guerra el 7 de octubre, el grupo islamista afirma que han muerto 22 mil 438 personas, en su mayoría mujeres y menores de edad.
El ejército del Estado hebreo anunció también que tres israelíes que fueron declarados desaparecidos desde el 7 de octubre están retenidos como rehenes en la Franja de Gaza, con lo que ya son 132 las personas que siguen en manos del movimiento islamista, clasificado como organización terrorista por Estados Unidos, Israel y la Unión Europea.
La guerra multiplicó las tensiones en la región, donde grupos respaldados por Irán en Líbano, Irak, Siria y Yemen han mostrado su solidaridad con el grupo islamista palestino.
Los temores se recrudecieron tras dos mortíferas explosiones en Irán el miércoles y el asesinato de Saleh Al Aruri, el número dos de Hamás, el martes en Líbano, donde miles de personas acudieron a su funeral.
En Jan Yunis, en el sur de Gaza, el Ejército israelí afirmó haber matado a combatientes de Hamás, haber atacado “infraestructuras terroristas” y bombardeado a “terroristas que querían colocar un artefacto explosivo cerca de soldados”.
El conflicto ha desatado una grave crisis humanitaria en Gaza, donde un 80% de sus 2.4 millones de habitantes viven desplazados y abarrotados en campamentos improvisados. /CON INFORMACIÓN DE AFP