Para el legendario pelotero mexicano Alfredo “Zurdo” Ortíz, el beisbol mexicano continúa en ascenso, sin embargo, también consideró necesaria una mejor difusión para atraer a un mayor número de seguidores y que se descubran más talentos nacionales, en vez apostar por la naturalización de jugadores extranjeros
En pleno festejo por sus 80 años, el emblemático jugador de Los Diablos Rojos del México contó en entrevista que no se despega del juego de la pelota caliente, pues ahora se mantiene trabajando con nuevas generaciones y autoridades de la Ciudad de México para darle continuidad a Tenochtitlán, un equipo de beisbol y sóftbol para niños y jóvenes que jugarán en el Estadio Fray Nano y que representará a la Alcaldía Venustiano Carranza.
“Esto continúa en pie, recientemente hablé con la alcaldesa Evelyn Parra y con su equipo de trabajo y quedamos que hay muchos pendientes por resolver porque es un proyecto algo complicado, pero me dijeron que durante este mes retomaremos las acciones. Esto puede ser un boom para los habitantes de esta alcaldía, pero también para toda la ciudad”.
Entre globos y fotografías históricas, donde lo mismo aparece pichando en el extinto Parque Delta del Seguro Social o en un inolvidable juego, donde sobrellevó todo el tiempo una lesión que tuvo que ser intervenida al final, familiares y amigos del “Zurdo” lo esperaban para iniciar el festejo por su onomástico. Mientras eso sucedía y notablemente orgulloso, el hombre que portó en el dorsal el número 15 por más de 25 años, presumió una fotografía de 1966 y dijo “de todo los que apaecen aquí, ya solo tres estamos vivos”.
Sobre su actual labor como promotor de un nuevo equipo, “El Zurdo” se siente con la confianza por toda la experiencia que acumuló en sus años como jugador donde enfrentó cualquier tipo de obstáculos y vivencias, como cuando los Orioles de Baltimore estuvieron a punto de ficharlo con el equipo, pero una seria lesión en el codo se atravesó en aquel momento, sin embargo, el episodio le dejó mucho aprendizaje
“A finales de 1963 parte del 64 nos mandaron a Gonzalo Villalobos, a Aarón Flores y a mi a la sucursal de los Orioles y estuvimos casi dos meses en los entrenamientos, el plan era que nos iban a mandar a triple A y después a las ligas mayores. Yo pensé que Diablos me venderían con ellos, pero no fue así y regresé con una gran ilusión de seguir haciendo cosas en mi país y en aquel entonces yo ya llevaba dos operaciones en el brazo y no sabía si iba a seguir pichando”.
PIDE MÁS TALENTO MEXICANO
La verdadera escuela para Alfredo Ortíz en realidad fueros los Diablos, pues a pesar de que también militó con escuadras como Olmecas de Tabasco, Tecolotes de Nuevo Laredo, Águila de Veracruz, Cafeteros de Córdoba, Leones de Yucatán y Pericos de Puebla, el jugador que Obtuvo 255 triunfos contra 210 derrotas, fue con los Pingos donde llegaron sus verdaderas glorias.
Y justo son esos recuerdos los llevan a reflexionar sobre los procesos de selección de talentos que hay en México actualmente y la importancia de prestarle atención a talentos locales, en vez de apostar por naturalizar extrangeros, no por algo malo, aclara, sino por una cuestión de posicionar mejor al país en este deporte por medios de elementos 100% nacionales.
“Hay que darle más oportunidades a los chavalos para que haya estrellas mexicanas, porque sí lo hay, pero muchas veces en cuanto sale un buen jugador lo venden, por eso no hay tantas estrellas locales coimo como lo fueron el Diablo Montoya o Nelson Barrera; a la gente le gusta tener a sus ídolos aquí y si les damos oportunidades, puede haber más estrellas por los menos unos dos o tres años aquí”, consideró.
Recordando el más reciente triunfo de la Selección Mexicana que llegó hasta el tercer lugar del Mundial de Beisbol, Alfredo Ortíz lo celebra, pero también apuntó que hay jugadores muy buenos en la Liga Mexicano que presumen ser mexicanos pero que en realidad tienen la nacionalidad de Estados Unidos, lo cual muchas veces le quita las oportunidades a elementos100% mexicanos.
Finalmente, Alfredo señaló que este deporte necesita mayor difusión, porque dentro de dos o tres años veremos a más jugadores mexicanos en las grandes ligas, “están surgiendo mucho y ojalá continuemos exportando talentos a equipos de Estados Unidos u otros países”.
CAJA DE DATOS
- Su mejor temporada fue en 1969 con los Diablos; ese año ganó 23 juegos y perdió 9, abanicando a 129 contrarios.
- En este circuito lanzó 3,841 innings, ponchó a 1,824 bateadores, consiguió 51 blanqueadas, con 3.13 de efectividad y .548 en porcentaje de ganados y perdidos.
- En la Liga Mexicana del Pacífico, como lanzador, ganó 105 juegos y perdió 98, ponchó a 936 bateadores, dio 13 cierres y su porcentaje de carreras limpias fue de 2.99 y el global de .517, jugando con Mayos de Navojoa, Naranjeros de Hermosillo, Cañeros de Los Mochis, Venados de Mazatlán y Aguilas de Mexicali.