Aunque las perspectivas de la economía nacional son favorables, se proyecta que tenga una desaceleración para este año con un crecimiento de 2.2% del Producto Interno Bruto (PIB), dijo el ex subgobernador del Banco de México, Everardo Elizondo.
En su participación en el panel Panorama Económico y Políticas de México, organizado por la Escuela de Gobierno y Transformación Pública del Tecnológico de Monterrey y el EGADE Business School, el economista señaló que la inflación durante 2024 se estima en 4%, lo cual sobrepasa la meta del Banco de México que indica que esta debe fluctuar no más allá del 3%.
Al referirse a la tasa de interés, Elizondo comentó que terminará el año en 9.25% contra los 11.25% con que inicia 2024.
Consideró que, aunque los analistas estiman que la tasa se reduzca en el primer trimestre de este año, para él, esa sería una decisión prematura, ya que hay “demasiadas presiones internas y ya no es un asunto solo de transmisión internacional”.
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Elizondo también expuso que hay una política fiscal “decididamente expansiva, frente a una demanda del consumo, a la que se sumará el gasto público” razones por las cuales no debería de bajarse la tasa de interés en el primer trimestre del año.
Respecto a la cotización, el peso frente al dólar, Elizondo comentó que “es una adivinanza”, pero mostró una gráfica en la que se estima que cierra 2024 en 18.8 pesos por dólar.
El experto reconoció que las proyecciones que se hicieron sobre las perspectivas económicas para 2023 no fueron certeras, pues se pronosticaba una recesión de la economía de Estados Unidos, aunque ahora se pronostica una desaceleración.
El ex subgobernador del Banco de México también desmenuzó el dato de las inversiones extranjeras en México y comentó que el país no es el destino que más recursos recibe, sino Brasil, nación a la que está llegando dinero de empresas europeas y en segundo lugar está Chile.
Comentó que la economía mexicana está estrechamente ligada a la de Estados Unidos y en el caso de la del país vecino del norte, su desaceleración la llevará a un crecimiento de su economía de 1.7% del PIB, con una inflación de 2.5%, también por encima de su meta que es de 2%, una tasa de interés de 5.1% y un desempleo del 4.1%.
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En el panel también participó el director de Accenture México, Jorge Castilla, quien explicó que la relocalización que se proyecta para México podría significar un crecimiento de entre tres y seis por ciento del PIB.
La diferencia entre uno y otro porcentaje, explicó, son las inversiones que haga el Estado en generación de energía, destacadamente en seguridad y en formación de talento, “sería terrible que la oportunidad la estuvieran tomando gente que decidiera migrar a México”.
CSAS