Era de prever y hasta lógico. El conflicto entre Israel y el terrorismo de Hamás se ha regionalizado de manera irremisible.
Primero fue la Franja de Gaza. Ante el terror que causó Hamás en las ciudades cercanas, Israel respondió de una manera contundente y se granjeó la enemistad de medio planeta. Al sur está Hamás pero al norte se encuentra el terrorismo chiita de Hezbolá. Lleva ya semanas lanzando misiles desde el sur de Líbano e Israel le responde de manera contundente.
Entonces llegaron los terroristas hutíes. Los barcos occidentales que pasaban por el Mar Rojo eran susceptibles de ser secuestrados por los terroristas. Y lo hacían en ese mar que termina en el Canal de Suez y de ahí al Mar Mediterráneo. A raíz de la amenaza de los hutíes, los barcos tuvieron que dar la vuelta por medio mundo. Eso hizo que todo subiera, empezando por el petróleo y sus derivados.
Estados Unidos y Gran Bretaña están atacándoles de manera directa. Siguen queriendo neutralizar a los terroristas hutíes bombardeándoles por todos lados. Pero estos responden también con determinación. Irán perdió hace pocos días a centenares de personas en el aniversario de la muerte del general Suleimani, un militar persa muy cercano al régimen de los ayatolás. Dos coches bomba dejaron centenares de muertos. Irán culpó a Israel, sin embargo el Estado Islámico se atribuyó la autoría. En todo caso la mecha de la guerra ya estaba encendida.
En la descomposición de este rompecabezas Irán atacó con misiles en la ciudad de Erbil, la capital del Kurdistán iraquí, matando a varios civiles.
La última. Pakistán, un país muy peligroso con decenas de bombas nucleares, entra en el juego y bombardea Irán en respuesta al lanzamiento por parte del país persa de drones y misiles en la provincia paquistaní de Baluchistán. Y aquí cuidado porque con Pakistán hablamos de palabras mayores, muy mayores
La región está que arde y nos afecta a todos, aunque sea de manera indirecta.
Es fundamental un cambio de rumbo político en la región o nos asomaremos a un abismo que no tiene fondo.
@pelaez_alberto