Desde las colecciones con y para estrellas deportivas a los bolsos para todos los gustos, son algunas de las tendencias de la Semana de la Moda masculina para el otoño e invierno 2024/2025 en París.
“Cuanto menos hay, más se aprecia, sin que resulte aburrido”, explica el periodista Matthieu Bobard Delière, de la revista Elle.
Este minimalismo surge naturalmente de la macrotendencia de 2023, el “lujo tranquilo” o lujo discreto, una moda sobria sin alardes ni logotipos.
El desfile de Pharrell Williams para Louis Vuitton, un homenaje al mundo del Oeste y de los indígenas, ha confirmado la reintroducción en el vestuario del estilo cowboy.
Las piezas ya están apareciendo en las colecciones de otros diseñadores, como Dries van Noten o Kenzo.
Stop Forever, Bohême, No me quedaré en silencio, ¿Quién mató a Bambi?, son mensajes a veces en tono de humor, a veces incomprensibles, aparecen escritos en la parte posterior de las prendas, especialmente en las chaquetas.
Kidill los utiliza en homenaje a la estética punk y luego grunge, Walter Van Beirendonck para conectarse con las generaciones más jóvenes, otros simplemente para reivindicar la marca de la casa (Kidsuper).
Es una tendencia que se va afirmando en las semanas de moda prêt-à-porter: diseñar colecciones muy juveniles y con la colaboración de deportistas de todos los horizontes.
El futbolista brasileño Ronaldinho desfiló para la marca estadounidense Kidsuper.
El japonés Mihara Yasuhiro sacó unas animadoras con pompones y el logo “París”, en guiño claro a los Juegos Olímpicos del verano de 2024 en la capital francesa.
Ningún hombre sale sin su bolso en las pasarelas. Ya sea como riñonera a la altura del pecho, tipo croissant por debajo de la axila, asumiendo su lado femenino.
O enormes bolsas de cuero o lana trenzada para los maestros peleteros Loewe, Hermès. O talega de pescador para Kenzo. O riñonera para Dior. O en forma de pequeños dinosaurios que hasta se pueden colgar de la cintura, según el japonés Mihara Yasuhiro. /AFP