La nadadora del equipo mexicano de nado sincronizado que irá a París 2024 es de las integrantes con más tiempo en la disciplina y que con gusto comparte lo aprendido entre sus compañeras
Foto: Especial | La nadadora del equipo mexicano de nado sincronizado que irá a París 2024 es de las integrantes con más tiempo en la disciplina y que con gusto comparte lo aprendido entre sus compañeras  

La nadadora del equipo mexicano de nado sincronizado que irá a París 2024 es de las integrantes con más tiempo en la disciplina y que con gusto comparte lo aprendido entre sus compañeras

A sus 29 años de edad, Samanta Rodríguez, integrante del equipo de Natación Artística que viajará para competir en los próximos Juegos Olímpicos París 2024, se percibe a sí misma como un pilar de apoyo profesional y emocional para sus compañeras, pues ella es una de las “veteranas” en la plantilla. 

Después de representar a México en los últimos Juegos Panamericanos, de donde se trajeron dos medallas de oro, Rodríguez está segura de que la esencia del equipo es la unión y la empatía entre las integrantes, así como con su equipo técnico, ya que eso mantiene la armonía y coordinación. 

“Las que somos veteranas en el equipo aportamos sabiduría, confianza, determinación y fuerza. Por otro lado, ellas nos aportan juventud, ganas de destacar y eso hace una buena combinación. Nos apoyamos muchísimo entre nosotras, si logramos percibir que una está nerviosa o bajoneada, intervenimos para hacerle ver que confiamos en su trabajo y ella debe confiar en el nuestro”, comentó Samanatha en entrevista.

Esta será la primera vez que la nadadora viva unos Juegos Olímpico y considera que también estarán expuestas a obstáculos u otras eventualidades, pues a pesar de tener la mejor preparación y concentración, saben que son seres humanos que en cualquier momento pueden equivocarse, es por ello que el equipo está en consatante armonía y comunicación. 

“Nunca perdemos esa parte de la humanidad, sabemos que somos personas y no ‘robots’,

siento que eso a nosotras nos puede diferenciar contra otros equipo. No es solo llegar a la meta, sino también demostrar que México tiene potencial y que podemos dar un increíble papel”, aseguró. 

La atleta remarcó que, a pesar de ser su primera aparición en unos Olímpicos y que sabe será una de las pruebas más exigentes en su carrera, hasta el momento la competencia más atesora son los Juegos Panamericanos, en donde ganaron dos preseas doradas, una por equipo y otra en dupla. 

Para la deportista el conseguir tal mérito representó ‘un trabajo de muchos años, algo con lo que siempre soñaron’, luego de que México estuvo ausente por 27 años en nado sincronizado. “Me siento satisfecha, contenta y motivada por este gran logro”. 

La nadadora artística enfatizó que a pesar de la experiencia que ya acumula, aún siente nervios y más cuando se trata de una competencia de gran nivel. 

Como parte extra del entrenamiento, Samanta Rodríguez recalcó la importancia del trabajo mental entre competencias, pues es muy posible llegar a perder la concentración.

“En cualquier momento debes estar dentro de tu ser, estar en tu zona y no dejar que cualquier distractor te saque de ello”.

 

CAJA DE DATOS 

La nadadora azteca comenzó en el deporte a los cinco años, ya que su madre no sabía nadar y en sus visitas a la playa temía que sus hijos no supieran qué hacer si una ola se los llevaba.

Comenzó en un chapoteadero de la Clínica 23, para después entrenar en una alberca olímpica del IMSS, en donde su madre le empezó a poner pruebas de nado sincronizado. 

Samanta compartió por mucho tiempo su gusto por la natación y el ballet tuvo debía decidir entre una de las dos, pues los horarios dejaron de empatar.