El Parlamento de Grecia aprobó por amplia mayoría un proyecto de ley sobre el matrimonio y la adopción para las parejas del mismo sexo, una reforma importante pese a la oposición de la iglesia ortodoxa.
Presentado por el partido de derecha en el poder Nueva-Democracia del primer ministro Kyriakos Mitsotakis, el texto fue aprobado por 176 de 254 diputados presentes en el Parlamento tras dos días de debate.
La iglesia considera el matrimonio homosexual como una amenaza al modelo familiar tradicional, además de sostener que respaldar dicho modelo podría abordar la disminución de la tasa de natalidad en varios países europeos.
Esa ideología también es apoyada por otros países ortodoxos, incluyendo el Patriarcado Ecuménico con sede en Estambul, Turquía.
La decisión del Parlamento griego representa un hito significativo en la lucha por la igualdad de derechos en el país y el mundo ortodoxo.