Autoridades de Chile han ordenado este martes que se reabra la investigación en torno a la muerte de Pablo Neruda, escritor y ganador del premio Nobel. Esto porque se cree que este habría sido envenenado por la dictadura de Augusto Pinochet en 1973.
“Se ordena la reapertura del sumario con el objeto de practicar las siguientes diligencias solicitadas por los querellantes” que “podrían aportar al esclarecimiento de los hechos”, dice la sentencia divulgada por el Poder Judicial de Chile.
Esta reapertura fue solicitada por los sobrinos de Neruda y el Partido Comunista, donde era militante el poeta.
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La Corte de Apelaciones revocó de esta forma la orden de cierre de la investigación adoptada en diciembre por la jueza titular del caso, Paola Plaza, y ordenó reabrir las indagatorias con la realización de nuevas pericias.
Pablo Neruda falleció el 23 de septiembre de 1973, apenas 12 días después del golpe de Estado en Chile. Tenía 69 años y sufría un cáncer de próstata.
En la orden se puede solicitar “un nuevo peritaje caligráfico respecto del certificado de defunción que habría sido extendido por el Dr.Vargas Salazar“, en el que dice que Neruda murió a consecuencia de la metástasis provocada por el cáncer de próstata que padecía.
Adicionalmente, la Corte ordenó realizar una “metapericia que permita revisar e interpretar los resultados de las pericias realizadas por los expertos de las Universidades de McMaster y Copenhague”, que analizaron restos extraídos del cadáver exhumado del poeta.
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De igual manera se cita a declarar a nuevos testigos y a un experto en el estudio de la bacteria “costridium botulinum”, que se cree pudo haber sido inoculada a Neruda.
En 2011 se inició la investigación judicial de la muerte de Neruda luego de que su exchofer, Manuel Araya, relatara a la prensa que el poeta pudo ser envenenado por la dictadura de Pinochet, que dejó más de 3 mil 200 muertos y unos 38 mil torturados, según cifras oficiales.