Este viernes salió el segundo disco de Kim Gordon bajo el título de The Collective. Sé que muchos jóvenes no tienen idea de quién estoy hablando pero Bye Bye, lead single de este LP, llamó la atención entre ellos sin saber su origen, irónicamente, en redes sociales.
La cantante, guitarrista, bajista y hasta escritora formó parte de Sonic Youth, banda de rock que estuvo en boca de todos hace algunos días porque Galilea Montijo portó una blusa con la portada de Goo (1991). Pero bueno, esa es otra historia y una forma rápida de ejemplificar.
Volviendo a Kim Gordon, el sucesor de No Home (2019) llega en medio del caos ascendente del mundo en donde la Inteligencia Artificial hace de las suyas y la dependencia a los aparatos tecnológicos sigue hipnotizándonos.
Inspirada en la novela de ciencia ficción The Candy House de Jennifer Egan, Gordon apostó por ponerle sonido a las líneas de esta publicación pero también decidió plasmar su locura.
Todo esto a ritmo de distorsiones que bien podrían pasar por tracks de Playboi Carti o Lil Yachty. Incluso, me atrevería a decir que suena mejor que a ellos.
Y es que trabajó de nuevo con Justin Raisen, productor de artistas como Charli XCX, Sky Ferreira y hasta Yves Tumor cuyo sonido disruptivo se ha vuelto un sello único.
La crudeza del sonido del trap y hasta con tintes de dub se hace presente a lo largo de sus 11 tracks en los cuales, Kim Gordon decide soltar algunas frases sueltas que le dan sentido a su mensaje.
“Me dio ganas de alterar, de seguir algo desconocido, tal vez incluso de fracasar”, mencionó la cantante previo al lanzamiento de este LP.
Y es que basada en el tema de las verdades distorsionadas, Kim se pone en el lugar de la humanidad para decirnos que todos vivimos en un estado de paranoia como colectivo pues ya no distinguimos entre lo que es realidad y lo que es ajeno a nosotros.
El aislamiento de la realidad es la única solución que estamos tomando ante el caos que nos rodea o al menos con eso podría resumir a The Collective.
Kim Gordon es más punk que muchos artistas que dicen serlo pues a sus 70 años ha vuelto a regalar una joya que debe estar sí o sí en tu playlist.
En una industria en el que el edadismo está a todo lo que da, Kim Gordon responde con un “al c*rajo” porque puede hacer lo que quiera. Ella es una rockstar y no necesita comprobarlo.
Obvio que a los puristas del rock no les gustará el sonido pero igual cumple con su objetivo: dar de qué hablar.
Habrá que ver cómo es recibido el LP pero de entrada puedo mencionar que del track uno al 11 es una experiencia sensorial. No se preocupen que sí hay guitarras, no todo es trap.
Seguimos…
@Leo_Vega