Estados Unidos implementó una serie de restricciones a la importación y exportación de artículos y servicios de defensa de origen estadounidense con destino u origen en Nicaragua.
Mediante un comunicado de prensa, se publicó la modificación del Reglamento de Tráfico Internacional de Armas (ITAR) por parte del Departamento de Estado, con el objetivo de actualizar la política comercial de defensa hacia Nicaragua.
EU manifestó su preocupación ante la “continua y brutal represión que ejercen las autoridades de Ortega-Murillo (actual presidente de la República de Nicaragua) contra el pueblo”.
Esto incluye las recientes elecciones que se llevaron a cabo en la costa caribeña, donde indígenas y afrodescendientes, son los principales pobladores, las cuales, el gobierno estadounidense tachó de ser una “simulación”.
El Departamento señaló que continuará con el uso de “todas las herramientas diplomáticas y económicas disponibles para promover la rendición de cuentas del régimen Ortega-Murillo”.
Además, añadieron que apoyaría los derechos humanos y las libertades fundamentales de los nicaragüenses, con el fin de buscar un futuro más justo y próspero.
En respuesta, el Departamento reveló mediante un aviso en el Registro Federal, la modificación de la sección 126.1 del ITAR para añadir al territorio nicagüarense como destino proscrito.