Es el inicio de la primavera, diversas zonas arqueológicas del país contemplaron el equinoccio de primavera.
En la zona arqueológica más visitada de México, Chichén Itzá, Yucatán, con paciencia se esperó el baile de luz y sombra que en punto de las 16:25 horas permitió el descenso de Kukulkán en la escalinata norte del Castillo de Chichén Itzá. La expectativa se sentía en el aire y es que la espera a 37 grados centígrados -con una sensación térmica de 41- hizo más gratificante la presencia de la serpiente emplumada.
El sol comenzaba su descenso en el horizonte occidental, bañando la pirámide con una luz dorada que iba y venía, en ocasiones los asistentes pedían a quienes estaban más adelante que se sentaran, ya que el espacio estaba lleno de visitantes nacionales y extranjeros. Miles de ojos observaban con atención cómo se iba formando la serpiente, primero una parte, la más alta, luego la de enmedio y así hasta la base del castillo.
La emoción se transmitío entre los asistentes. Muchos se tomaban fotos, selfies, simulaban, por la perspectiva, agarrar con las manos las pirámides, otros iban de blanco, decían que para recargar energía, la suficiente para llegar plenos al próximo año.
Mientras más cerca del descenso completo de Kukulkán la expectativa era mayor, ya que si bien algunos asistentes bailaban, elevaban las manos al cielo.
Fueron pocos minutos los que duró el espectáculo de luz y sombra, pero consiguió hacer comunidad entre personas de diferentes lugares del mundo, ya que una vez que estuvo completo el descenso de la Serpiente Emplumada todo fue regocijo.
CELEBRAN EN EDOMEX
En el Estado de México, Teotihuacán fue el escenario, al igual que en San Felipe del Progreso.
En este último, Walterio Ramírez, jefe supremo Otomí en ese municipio, agradeció a la tierra, “porque sin ella no hay vida”.
Cientos asistieron vestidos de blanco para retribuir al agua, al sol, fuego y aire por su presencia en el planeta.
En Teotihuacán, miles de turistas nacionales y extranjeros acudieron a cargarse de energía, pese a que está prohibido subir a las pirámides, vestidos de blanco.
Con brazos en alto y la mirada hacia el cielo a la hora en la que se abren los portales del cosmos, los visitantes disfrutaron de la ceremonia.
CHOLULA NO SE QUEDÓ ATRÁS
En San Pedro y San Andrés Cholula, a pesar de que el equinoccio de primavera ocurrió el 19 de marzo a las 21:06 horas, ayer cientos de personas llegaron a la zona arqueológica que comparten ambos municipios.
En la explanada del Parque Soria fue posible observar a visitantes, quienes aprovecharon para hacerse limpias o solamente levantar los brazos, con la finalidad de recibir los rayos del sol con el inicio de esta estación del año.