La respuesta del documental Quiet on Set, sobre los abusos a los niños actores en los sets de televisión, ha sido de gran impacto, y durante una proyección de éste, las directoras y productoras Mary Robertson y Emma Schwartz, insinuaron que el siguiente ámbito de entretenimiento infantil a investigar son las redes sociales.
“Una cosa sobre la que hemos tenido conversaciones como resultado de esto es que, si nos fijamos en dónde está el entretenimiento infantil, por así decirlo, hoy en día, no es sólo en los estudios, sino en las redes sociales”, dijo Schwartz.
“Ese es un universo donde casi no hay supervisión de lo que sucede dentro de los hogares de las personas, en estas pantallas, y de lo que sucede para proteger a esos niños también, y ese es en muchos sentidos el futuro de donde muchos de nosotros obtenemos nuestras historias y nuestro contenido”.
Además de la proyección, ocurrió un panel en donde estuvieron los exactores infantiles Drake Bell, Giovonnie Samuels y Bryan Christopher Hearne, así como la reportera de Business Insider, Kate Taylor.
En él, además de señalar los agujeros en las políticas que permitieron a Schneider y su colega, Brian Peck, salirse con la suya con prácticas laborales tóxicas, abordaron la culpa injusta que el público ha echado a los padres.
“Escuchamos mucho: ‘¿dónde estaban los padres?’ o ‘Si yo fuera su padre’, y hay que entenderlo, somos niños”, dijo Bell. “Algunos de estos son nuestros primeros trabajos, otros son la primera vez que nuestros padres están en un set. Están aprendiendo junto con nosotros y no tienen la experiencia en estos sets de películas para poder esforzarse y esforzarse”.