Durante el fin de semana vimos una lluvia de noticias falsas en las redes sociales sobre el ataque de Irán a Israel.
El uso de las redes sociales como fuente de información debe partir de un principio básico, recurrir a fuentes confiables. El trabajo durante esas horas de la cuenta de X de nuestro @diario24horas fue impecable, como el de otras fuentes, pero había mucha información falsa y mal intencionada.
En el colmo, muchos haters mexicanos creyeron que un respaldo a Irán tenía alguna lógica con su pensamiento político local, cuando claramente no entienden ni una palabra de lo que implica esa teocracia islámica.
En medio de todo eso, vale la pena ver cuál fue el comportamiento de los mercados financieros durante esos momentos del “breaking news”, porque eso sí que tiene una repercusión directa en nuestros bolsillos.
El ataque iraní a territorio de Israel ocurrió durante la pausa del fin de semana en los mercados financieros. Sin embargo, las operaciones realmente se mantienen a toda hora, todo el tiempo.
Por la zona del mundo de la que se trata, uno de los precios más sensibles es el del petróleo. Los futuros del Brent del Mar del Norte, que operan en Londres, sufrieron un repunte momentáneo.
No es para menos, nunca en la historia una potencia nuclear, de gran capacidad militar como Irán, había atacado directamente a otra potencia nuclear y de gran capacidad militar como Israel, a pesar de que ambos estados viven una tensa relación desde 1979.
Pero el funcionamiento perfecto del Domo de Hierro, reforzado por el ejército de Estados Unidos, redujo a cero el número de muertes por ese ataque iraní.
No fue un ataque sorpresa, Irán avisó a Estados Unidos. Tras el ataque y su pobre resultado, Washington advirtió a Israel que no respondiera la agresión de inmediato o se quedaría solo en esa guerra.
Durante las horas posteriores al ataque los mercados asumieron el mensaje del ojo por ojo, porque el antecedente es un ataque israelí al consulado de Irán en Damasco que le costó la vida a siete personas, entre ellas un alto mando militar de la República islámica.
Occidente se maravilló con el funcionamiento de un Domo de Hierro casi perfecto que da una ventaja defensiva a Israel, país que está más en el ánimo de los mercados.
Había dos opciones, reaccionar ante un inminente conflicto bélico global y perder posiciones por ir a un refugio financiero seguro o pensar que el ojo por ojo alcanzaba, por ahora, para una tensa y temporal calma.
Los que apostaron a no más disparos por ahora, ganaron la apuesta y los indicadores financieros pronto regresaron a sus preocupaciones habituales.
Que quede claro, que no haya escalado en el momento, no significa que no sea una mecha encendida.
Por eso, lo que más vale es poner mucha atención en las señales y aquí dejo una:
Hay un indicador muy pertinente en los mercados, es una medición de la volatilidad del Standard and Poor‘s 500 (S&P500) que mide la cotización de las 500 empresas más grandes de Estados Unidos. El índice VIX anticipa sus ganancias o pérdidas y ahora mismo se ha movido de forma importante hacia el lado negativo.
No es ningún aviso, solo un indicador.
@campossuarez