La iniciativa del Fondo de Pensiones del Bienestar propuesta por el presidente López Obrador que aprobará el próximo lunes la mayoría morenista en el Congreso de la Unión, es el broche de odio con el que el tabasqueño pretende cerrar su gestión.
En medio de las campañas proselitistas y con un afán meramente electorero, el tabasqueño y sus mandaderos en San Lázaro se disponen a hincarle el diente a más de 40 mil millones de pesos de las cuentas inactivas (los ahorros de los trabajadores no reclamados) de las afores para dizque “fondear” el fondo de pensiones obradorista, el cual supuestamente también se financiará con las utilidades que generen el Tren Maya, el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” (AIFA), Mexicana de Aviación, la refinería de Dos Bocas y el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep). ¡Sí, Chucha!
¿Cuáles utilidades?, ¿cuáles ganancias? Si estos esperpentos operan en números rojos. Son un gigantesco agujero negro (como Pemex y CFE) al que a diario se le arrojan millones de pesos que van a dar a fondo perdido.
Vamos a decirlo de una vez (José José dixit) este Fondo de Pensiones del Bienestar es un robo en despoblado cínico y descarado, porque el ahorro de los trabajadores es propiedad privada y el Gobierno lo está tomando arbitraria y unilateralmente.
Lo que aprobó en comisiones el bloque oficialista fue la confiscación de las cuentas de todos los trabajadores de más de 70 años en el caso de la ley del IMSS y de más de 75 años en el caso de la ley del Issste para financiar un fondo sin reglas y sin mecanismos claros.
Además, si nos basamos en el dictamen que se entregó y el cual fue alterado mañosamente por el diputado poblano Ignacio Mier Velazco (no, no fueron los “duendes” redactores ni el equipo técnico de la Comisión de Seguridad Social, porque éstos no se mandan solos), encontraremos varios vacíos y omisiones, como lo es el cuento chino del presidente Obrador de que los trabajadores se jubilarán con una pensión de cien por ciento de su salario.
Esto es mentira. Como también lo es el pago de 16 mil 777 pesos mensuales, porque este monto no viene escrito en ninguna parte del dictamen y sólo se mencionó en su momento como parte de una reforma constitucional que hizo el Presidente y que no pasó.
Lo que se aprobará el próximo lunes es una ley secundaria y no una reforma constitucional, así que pónganse abusados.
Lo que está en juego son 18 millones de cuentas por un monto que supera los 40 mil millones de pesos, según la Amafore. Estamos hablando de cuentas inactivas, de cuentas que no han sido reclamadas o de aquellas que pertenecen a trabajadores de 70 años o más. Son personas que murieron de Covid, personas que cotizaron y se fueron a trabajar a Estados Unidos, etcétera.
La pretensión de López Obrador y sus mandaderos es no devolverles a 18 millones de mexicanos lo que tanto esfuerzo, trabajo y sacrificio les costó.
ENANO POLÍTICO.- Miguel Torruco Garza, candidato morenista a la alcaldía de Miguel Hidalgo en la CDMX, se burló de la estatura física del edil panista, Mauricio Tabe Echartea, durante el primer debate entre los aspirantes a gobernar dicha demarcación capitalina.
Alguien debería aconsejarle que mejor se ponga a trabajar en su poca estatura política, moral y humana.
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