Por segunda vez en menos de un año, el principal socio de Tesla, Elon Musk, viajó desde el fin de semana a China, el mayor mercado mundial de vehículos eléctricos, donde el primer ministro Li Qiang le prometió ayer que el país permanecerá “siempre” abierto a las empresas extranjeras.
Musk llegó “por invitación del Consejo Chino para la Promoción del Comercio Internacional”, informó la cadena oficial CCTV.
La visita no había sido anunciada. Según CCTV, Li declaró durante la reunión que “el inmenso mercado chino siempre estará abierto a las empresas con capital extranjero”.
“China cumplirá con su palabra y seguirá trabajando duro para ampliar el acceso al mercado y reforzar las garantías de servicio”, aseguró.
Pekín también ofrecerá a las empresas extranjeras un “mejor entorno para los negocios”, para que “las compañías del mundo entero puedan tener la mente tranquila al invertir en China”, subrayó el primer ministro.
China tiene muchos intereses comerciales para Elon Musk, que visitó el país por última vez en junio de 2023.
La fábrica de Tesla en Shangai produjo en 2023 casi un millón de vehículos, el 40% destinados a la exportación hacia mercados en Asia y Europa.