Una ola de desapariciones masivas azota a Nuevo León y Sinaloa, donde se han reportado levantones de hasta más de 65 personas, quienes son sacadas de su casa, finca o centro de trabajo.
Esta variante de delito ha impactado este 2024, a ciudades como Culiacán, Anáhuac, Ciénega de Flores y Salina Victoria. Sin embargo, tiene la particularidad de que después de levantarlos, la mayoría de los plagiados recuperan su libertad unos días después.
Esta variante busca generar terror en la población y en la sociedad, sin importar si realizan actividades lícitas o no, alertó Rubén Ortega Montes, miembro del Observatorio de Seguridad y Justicia de Jalisco.
Otra de los métodos, comentó, es que lo hacen para ajustar cuentas, dictar medidas para las víctimas de cobro de piso, como una forma de presionar y aterrorizarlos.
Cambiaron su modus operandi y se llevan a toda una familia o a un grupo, y marcan un estándar diferente y aunque no son tan sangrientos, como los descabezados, su impacto es igual o hasta mayor. Prueba de ello, detalló, es que no hay denuncias formales, sino que nos enteramos por los medios de comunicación.
En lo que va de 2024, se han reportado los casos de 12 albañiles, en Anáhuac, 13 de Ciénega de Flores y 14 en Salina Victoria, quienes, tras un cautivero de unos días, fueron liberados 30 y hay nueve aún sin localizar.
Pero este delito no es exclusivo del norte, porque también en Culiacán, Sinaloa, hubo un episodio donde 66 fueron levantados, de los cuales todos aparecieron con vida, según las autoridades, pero las familias dicen que ocho no han regresado.
Ortega Montes hizo hincapié en que los levantones masivos han sido en centros urbanos y áreas con una marcada presencia de delincuencia organizada de distintos cárteles, pero al final de cuentas son células fuertes que transitan a otra forma de presión.
El también catedrático de la Universidad de Guadalajara (UdeG) resaltó que generan pánico y una percepción de inseguridad mucho mayor, porque ya no estás seguro ni en tus centros de trabajo ni en tu casa.
El estado incumple con la garantía de seguridad, establecidas en el artículo 21 constitucional, y es muy complicado prevenir estos secuestros masivos, porque se requiere mucho trabajo, compromiso y labores de inteligencia y contrainteligencia, indicó.
AUTORIDADES DAN SU VERSIÓN
El fiscal general de justicia deNuevo León, Pedro Arce Jardó n, declaró que estos hechos son perpetrados por grupos criminales que buscan información de sus rivales narcomenudistas y de paso desestabilizar al Estado.
En diferentes hechos, se contabilizaron 44 personas plagiadas, de las cuales nueve no han sido localizadas.
Destacó que por el modus operandi, tras los interrogatorios a las víctimas, se tiene información para ejecutar órdenes de aprehensión.
Al respecto, el secretario de Seguridad Estatal, Gerardo Palacios Pámanes, detalló que estos plagios masivos fuera de la zona metropolitana, buscan “perturbar la paz” y desestabilizar el estado.
“Hay una intención muy clara de perturbar la paz en el estado de Nuevo León, porque si bien es una buena noticia que se hayan liberado con bien y a salvo, llama la atención el modus operandi”, dijo.
LA REALIDAD
La desaparición de personas en grupo no es nueva y el año pasado hubo otros casos como los del call center de Zapopan o los jóvenes de Lagos de Moreno, donde se los llevaron, pero después aparecieron sin vida.
El especialista de la UdeG aseguró que hay testimonios de personas que han escapado y cuentan que los usan para trabajo forzados, para sumarse a las filas de algún cártel como sicarios, vendedores o alguna otra actividad ilícita.
Sin embargo, dijo, como no hay denuncias formales, se desconoce realmente el objetivo.
Y en el caso de las personas que fueron liberadas en grupo y después puestas en libertad, sucede lo mismo, no declaran y se desconoce el objetivo real, porque temen hablar. Además, al no haber denuncia, no existe el delito, sentenció.