El Gobierno capitalino se olvidó de los Central de Abasto (Ceda) de la Ciudad de México y la dejó abandonada a su suerte en medio de la violencia, los grupos delictivos y las extorsiones; por ello, es necesaria la intervención de la Guardia Nacional para realizar rondines, pidió la diputada panista Daniela Álvarez.
La panista lamentó que desde la Secretaría de Desarrollo Económico no se hiciera nada para frenar que este mercado más grande del país se convirtiera en una “escuela de delincuentes”.
“El secretario Fadlala Akabani parece otro porro más de Morena en vez de cuidar la investidura del Gobierno al que representa, él ha sido quien le tendió la mano a los criminales para apropiarse de la Central de Abasto en Iztapalapa y al mismo tiempo, hacer campaña para Morena como funcionario público”, mencionó.
Álvarez recordó que, en marzo del año pasado, fueron asesinadas tres personas en una bodega de la Central de Abasto, mientras trabajaban cargando fruta y no pasó nada, se desconoce los avances de las investigaciones o si hay personas detenidas.
“Hay más sucesos, pero lo más preocupante es que este lugar sea un atractivo para los extorsionadores donde el comercio de abarrotes, víveres, frutas o verduras, así como mariscos o pescado, ha provocado que maleantes amenacen a bodegueros”, dijo.
El diputado Luis Chávez García pidió que Akabani comparezca y explique por qué no toma en serio estas problemáticas y desde la Sedeco no se gestione ante las autoridades de seguridad las medidas para que los dueños de bodegas, trabajadores, administradores y los clientes no enfrenten más peligros.
Carlos Fernández, diputado de la Asociación Parlamentaria dijo que junto con Acción Nacional, presentará un Punto de Acuerdo en el Congreso local para que el Gobierno capitalino haga las gestiones para que la Guardia Nacional pueda instalar un módulo de vigilancia en la Central de Abasto.
“La seguridad interna de esta Central se ha visto rebasada, ni la policía capitalina o la Fiscalía han podido detener las extorsiones o violencia; la Secretaría de Seguridad Ciudadana tiene registro de que las extorsiones se incrementaron en 2023 en 5.6 por ciento en comparación con el 2022, pero Marcela Villegas, Coordinadora de la Central de Abasto, se ha quedado callada y no actúa”, abundó.