Durante el juicio al expresidente Donald Trump, la exactriz porno de 45 años, Stormy Daniels, fue llamada ayer al estrado, donde describió su encuentro sexual de 2006, en su primer cara a cara a unos metros del magnate.
“Sabía que era mayor, probablemente mayor que mi padre”, relató, mientras la Fiscalía mostraba una foto de los dos en un torneo de golf, cuando ella tenía 27 años y trabajaba en relaciones públicas de la empresa Wicked Entertainment, con un top negro junto a Trump, quien vestía con camisa amarilla y sombrero, abrazándose.
“El Sr. Trump dijo que quería cenar conmigo”, refirió al contar cómo llegó a la suite del hotel, “tres veces más grande que mi apartamento”. Daniels relató que fue al baño y que cuando regresó a la habitación Trump “estaba en la cama” en calzones y una camiseta. “Me sorprendió. No esperaba que hubiera nadie allí, especialmente sin mucha ropa”, comentó.
“No estuve amenazada ni verbal ni físicamente” aunque había un “desequilibrio de poder”, dijo, al explicar que tuvieron sexo en la cama, “en la posición del misionero”, y que el expresidente no usó preservativo. Trump niega que tuvo relaciones sexuales con ella. /24 HORAS