El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que la violencia política-electoral en el país se debe a los vínculos creados entre las autoridades y la delincuencia.
Lo anterior, tras insistir en su pronóstico de que las votaciones de este domingo serán en total calma y con “verdadera” democracia, pues en sus palabras, en gobiernos anteriores sólo fueron simulaciones.
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Además, minimizó la preocupación por posibles hechos violentos durante la jornada de votación pero explicó que, para él, la violencia político-electoral tiene que ver:
“Con que se establecieron vínculos entre autoridades y la delincuencia. Primero era darle dinero al candidato para que sí ganaba el presidente municipal, le dejara nombrar al secretario de obra pública, luego de darle dinero para que le dejara nombrar al jefe la policía y ya luego era, ¡no darle dinero poner ellos a candidato! Eso lo establecieron estos hipócritas corruptos del período neoliberal”.
Y aprovechó para criticar la campaña en su contra de #AMLONarcoPresidente, la cual, según dijo, ya ha perdido efectividad, ya que los que han financiado dicha etiqueta en redes sociales (sus opositores):
“Nunca imaginaron con quién iban a topar, porque estaban acostumbrados a someter, era muy difícil que un presidente no fuese pelele o títere de los potentados”.
Y por ello, aprovechó para decir que en el último trecho de su administración también está enfocado en que no haya ni un sólo acto de represión, masacres ni reportes de desapariciones forzadas:
“Quiero terminar el gobierno sin ningún solo acto de represión, sin una masacre, sin desaparecidos; con paz, con tranquilidad, pero al mismo tiempo, sin autoritarismo”.
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Por ello reiteró su petición de que en cualquier manifestación que se desarrolle en el Zócalo que sea sin violencia:
“Todo mundo se manifiesta, y tiene libertades, lo único que les pedimos es que no haya violencia, todos tienen derecho a expresarse, manifestarse, vivimos en un país libre, y yo quiero (terminar sin autoritarismo) y desde luego que lo vamos a lograr, porque ya pasamos bastante tiempo y circunstancias también difíciles, y nunca hemos caído en una provocación”.
De ahí presumió que en toda su carrera política siempre ha resistido provocaciones y ha optado por la “no violencia”.