El Instituto del Sueño define el Síndrome de Piernas Inquietas (menos conocido como enfermedad de Willis-Ekbom) como un trastorno de origen neurológico que produce sensaciones molestas en las extremidades, aunque principalmente en las piernas, durante espacios de reposo, es decir estando sentado o acostado.
La afectación no distingue entre hombres y mujeres, y puede llegar a afectar severamente a un 2 o 3% de la población según los datos recogidos por el instituto con base en Madrid, Chile y Panamá. Aseguran también que puede aparecer a cualquier edad, pero que puede llegar a ser más frecuente pasando los 40 años.
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Información del Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares de EU asegura que no hay cura, y que generalmente es un padecimiento que dura para toda la vida. Sí hay, destacan, algunos tratamientos para aliviar los síntomas.
¿Cuáles son los síntomas del síndrome de piernas inquietas?
- Necesidad de tener las piernas en movimiento.
- Sensación de incomodidad durante periodos de descanso.
- Sensación de alivio con el movimiento.
- Movimientos involuntarios en las piernas por la noche.
- Pacientes declaran que son sensaciones intensas o desagradables en las piernas o en los pies.
- Cosquilleo, hormigueo, tirones, sensación pulsátil, dolor, picazón, choque eléctrico.
Otras de las consecuencias que podría generar este síndrome son: cambios en el estado de ánimo, agotamiento y somnolencia durante el día, problemas de concentración, problemas de memoria, menos productividad y depresión y ansiedad.
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Debido a que puede ocasionar problemas graves a mediano o largo plazo, es recomendable asistir con un médico para una evaluación.
Con información de Mayo Clinic, Instituto del Sueño e Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares de EU.
DG