En la actualidad, el panorama político regional muestra una tendencia izquierdista, destacando figuras como Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil, Andrés Manuel López Obrador
Foto: Especial | En la actualidad, el panorama político regional muestra una tendencia izquierdista, destacando figuras como Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil, Andrés Manuel López Obrador  

En la actualidad, el panorama político regional muestra una tendencia izquierdista, destacando figuras como Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil, Andrés Manuel López Obrador en México (quien será sucedido por Claudia Sheinbaum el 1º de octubre), y Gustavo Petro en Colombia, entre otros líderes destacados.

En ese sentido, la política en América Latina ha experimentado cambios significativos en las últimas décadas, moviéndose entre ciclos de derecha e izquierda, de acuerdo con José Briceño Ruiz, investigador del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Para Briceño Ruiz, es fundamental interpretar cada realidad nacional con sus particularidades políticas, institucionales y económicas. América Latina “no puede ser vista como una entidad monolítica; cada país presenta una dinámica única que debe ser entendida en su propio contexto”, subrayó.

Según el investigador del CIALC, la promoción de la democracia en los años 2000 fue una tendencia notable, pero en 2013 se produjo un giro significativo hacia la izquierda en América del Sur. “Pensábamos que el ciclo de la derecha, incluso del liberalismo libertario, se mantendría, pero no ha sido así”, comentó el investigador. La mayoría de los países, incluyendo Chile, adoptaron políticas de izquierda, aunque Chile mantuvo una postura más moderada.

La coexistencia de países con crisis económicas persistentes y una mala gestión por parte de los partidos tradicionales es un tema que favoreció ese cambio. “Ahora coexisten países con crisis económicas persistentes y mala gestión por parte de partidos tradicionales tanto de derecha como de izquierda”, señaló Briceño Ruiz. Por ejemplo, “en Argentina, el macrismo representaba un movimiento liberal con un líder carismático y reconocido por los sectores populares, pero la inestabilidad permitió encumbrar a un personaje como Javier Milei”.

Por otra parte, uno de los puntos más destacados por el investigador es la polarización que afecta la estabilidad de la cooperación regional, por ejemplo, la existente sobre “el tema migratorio en Chile ha tenido un impacto significativo en las elecciones recientes”, mencionó Briceño Ruiz. “Esta polarización no contribuye a la estabilidad de la cooperación regional, como en el caso del Mercosur”, ya que los gobiernos de Uruguay y Argentina no aprueban pactar con un gobierno de izquierda como el Brasil de Lula.

 

Finalmente, advirtió que es difícil vaticinar un avance de la derecha, ya que la polarización, las crisis económicas y los liderazgos emergentes continúan moldeando el panorama político, haciendo indispensable un análisis profundo y contextualizado por cada país.