Estados Unidos prohibió ayer a la empresa de ciberseguridad Kaspersky, con sede en Rusia, ofrecer sus populares productos antivirus en el país, según anunció el Departamento de Comercio.
“Kaspersky ya no podrá, entre otras actividades, vender su software dentro de Estados Unidos ni proporcionar actualizaciones de software que ya esté en uso”, dijo la agencia.
“Rusia ha demostrado una y otra vez que tiene la capacidad y la intención de explotar empresas rusas, como Kaspersky Lab, para recopilar y utilizar información sensible como arma”, dijo la secretaria de Comercio estadounidense, Gina Raimondo, en un comunicado.
Estas medidas muestran a los adversarios de Estados Unidos que el Departamento de Comercio no dudará en actuar cuando “su tecnología represente un riesgo para Estados Unidos y sus ciudadanos”, añadió.
Si bien la empresa multinacional tiene su sede en Moscú, cuenta con oficinas en 31 países y presta servicios a más de 400 millones de usuarios y 270 mil clientes corporativos en más de 200 países, según el Departamento de Comercio.
Además de prohibir la venta del software antivirus de Kaspersky, el Departamento de Comercio añadió tres entidades vinculadas a la compañía a una lista de empresas consideradas como una preocupación de seguridad nacional, “por su cooperación con las autoridades militares y de inteligencia rusas en apoyo a los objetivos de ciberinteligencia del gobierno ruso”.
El Departamento de Comercio dijo que “alienta enérgicamente” a los usuarios a cambiarse a nuevos proveedores, aunque su decisión no les prohíbe utilizar el software si así lo deciden.
A Kaspersky se le permite continuar ciertas operaciones en Estados Unidos, incluida la actualización de antivirus, hasta el 29 de septiembre de este año, “para minimizar las interrupciones a los consumidores y empresas estadounidenses y darles tiempo para encontrar alternativas adecuadas”, añadió el Departamento de Comercio.
El plan prohibirá efectivamente las descargas de actualizaciones de software, las reventas y las licencias del producto a partir del 29 de septiembre y se restringirán los nuevos negocios.