Rusia amenazó ayer a Estados Unidos con represalias y lo acusó de “matar a niños rusos”, al día siguiente de un bombardeo ucraniano en Crimea que Moscú afirma fue llevado a cabo con misiles estadounidenses.
Rusia considera que Estados Unidos se convirtió en parte del conflicto en Ucrania cuando autorizó a Kiev a emplear misiles de largo alcance contra las regiones rusas y contra Crimea.
Al menos cuatro personas murieron en el bombardeo el domingo, entre ellas dos niños, y más de 150 resultaron heridas, según las autoridades locales.
“Es evidente que la participación de Estados Unidos en los combates, su participación directa, que conlleva la muerte de ciudadanos rusos, tiene que tener consecuencias”, declaró el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov.
El vocero pidió a los periodistas que pregunten en Europa y en Estados Unidos “por qué sus gobiernos matan a niños rusos”.
Según Moscú, Ucrania no puede llevar a cabo por sí sola bombardeos con misiles de largo alcance ATACMS, como el del domingo en Crimea, ya que requieren especialistas, tecnologías y datos de la inteligencia estadounidense.
Cabe recordar que Rusia anexó Crimea en 2014, una península que era parte de Ucrania, tras un referéndum que muchos países consideran ilegal. Crimea es estratégicamente importante por su ubicación y su base naval en Sebastopol. La anexión no ha sido reconocida por la mayoría de la comunidad internacional y es un punto central de las tensiones actuales.
Por otro lado, la escalada de tensiones podría llevar a un aumento en el conflicto militar, con más ataques y represalias, y también podría intensificar la guerra económica con nuevas sanciones y restricciones comerciales, afectando la economía global.