Desde la grada del flamante SoFi Stadium, Neymar asistió el lunes desesperado a la falta de puntería de sus jóvenes relevos en el ataque de Brasil, que empató 0-0 ante la joven Costa Rica en su estreno en la Copa América-2024.
Neymar, gran ausente del torneo continental, viajó a Los Ángeles (California) para seguir con la recuperación de su grave lesión de rodilla y para apoyar a la ‘Seleçao’, cuyo ataque dejó en manos de la nueva generación liderada por Vinicius Jr.
El extremo del Real Madrid, fuerte candidato al Balón de Oro, fue parte de un infructuoso asedio sobre el arco tico al que se sumaron Rodrygo, Raphinha y, en la segunda parte, la nueva joya brasileña Endrick.
La renovada ‘Canarinha’ vio como el VAR revertía un gol de Marquinhos en la primera mitad.
Neymar no ocultó su frustración en la tribuna del SoFi Stadium, la cancha más cara del mundo con más de 5.000 millones de dólares de presupuesto. FP