La directora Claudia Torres indicó que además de Iberdrola México, quien está al pendiente de que "Luces de Esperanza" funcione y se mantenga prosperando, es el gobierno municipal
Foto: Iberdrola México | La directora Claudia Torres indicó que además de Iberdrola México, quien está al pendiente de que "Luces de Esperanza" funcione y se mantenga prosperando, es el gobierno municipal  

Tehuacán, Puebla. En las inmediaciones del Telebachillerato Comunitario No. 52, justo a un costado del patio central que se encuentra rodeado de las aulas móviles, árboles y cientos de metros de terreno, a escasos metro de donde se llevará a cabo la ceremonia de encendido de Luces de Esperanza para así continuar con las siguientes fases del proyecto de Iberdrola México e Ilumiméxico en Puebla, la directora del plantel, Claudia Torres concedió una breve charla para 24 HORAS.

Bajo la sombra de un árbol que resguarda del calor intenso, la directora cuenta que llegó en 2017, hace aproximadamente siete años, justo tres años después de que la escuela se fundara sobre el terreno prestado de una Telesecundaria.

Recuerda que el proyecto surge porque “con anterioridad habíamos intentado que la luz llegará a través de los modos convencionales”, es decir con las instalaciones habituales. Pero no se dio. Sin embargo, el Parque Industrial de la zona de Tehuacán los refirió con la empresa –es decir Ilumiméxico e Iberdrola México–.

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“Como no nos encontrábamos nos dejaron una nota con la información de la empresa para ponernos en contacto y dos días después”, cuenta, “vienen y hacen un estudio de por qué es que no hay luz”. Y detalla que aunque en ese momento del contacto no les confirmaron nada sobre si se haría o no lo que tanto habían buscado, al paso de pocos días les confirmaron con una grata sorpresa: ya traían todo para hacer la instalación.

Aunque en un inicio hizo mención del terreno prestado en que estaba situada la escuela, más tarde comentó que ya estaba a nombre de la institución desde “el año 2020 o 2021”, duda, porque no recuerda con claridad. Pero dice les fue donado en nombre de la secretaría “y es ahí donde nosotros decidimos pasarnos aquí y empezar a construir lo que tenemos actualmente pero que es de nosotros”, indica con felicidad.

“Aspiramos a tener más de tres grupos”, responde a este diario cuando se le pregunta qué es lo que sigue para seguir creciendo la institución. “Actualmente tenemos tres grupos: uno de cada grado. Entonces tenemos una matrícula de 90 alumnos. La idea es poder acrecentar esa matrícula, poder tener instalaciones propias y trabajar otro tipo de proyectos con Iberdrola (México) y Construrarte”. Sobre esto último, porque dice que desea que los alumnos saquen provecho a temas que los alumnos de pronto desconocen.

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Actualmente, dadas las circunstancias, sólo se trabaja un turno en el Telebachillerato. Sin embargo, pese a las limitaciones que todavía existen, confiesa que con el abastecimiento de luz con el que cuentan desde los meses finales del año pasado, todo ha sido más sencillo hasta para realizar un documento. Por ejemplo, dice, “el momento en que el alumno llegue a inscribirse, nosotros podemos hacer la cédula de registro y que en ese momento el padre de familia firme el mismo”. Antes, recuerda, hacían que el padre o madre de familia volviera para ese simple trámite.

Finalmente, apunta que además de Iberdrola México, quien está al pendiente de que el proyecto funcione y se mantenga prosperando, es el gobierno municipal –al mando de Pedro Tepole Hernández–. Y atesta con una sonrisa para finalizar que este cambio le ha hecho sentirse bien, pues ya no tienen que estarse preocupando por cosas que para otros son tan sencillas, como mandar un archivo o quedarse sin pila.

CSAS