El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha declarado que no mantendrá conversaciones con su homólogo argentino, Javier Milei, hasta que este último se disculpe por las declaraciones que Lula considera “tonterías” y ofensivas hacia él y Brasil.
En una entrevista con el portal UOL, Lula expresó: “No he hablado con el presidente de Argentina porque creo que él debe pedir disculpas a Brasil y a mí. Ha dicho muchas tonterías, simplemente quiero que pida disculpas”.
Lula no especificó las declaraciones exactas que le llevaron a esta postura, pero durante la campaña electoral, Milei calificó al brasileño de “corrupto” y “comunista”, lo cual generó tensiones entre ambos países.
El presidente brasileño también destacó que Milei no será quien perturbe la relación entre Argentina y Brasil, subrayando la importancia de mantener la estabilidad en la región.
En respuesta, el vocero de la presidencia argentina, Manuel Adorni, afirmó que respetan los deseos de Lula, aunque aseguró que su presidente no ha cometido nada que amerite disculpas.
A pesar de intentos previos de acercamiento, como durante la cumbre del G7 en Italia, donde ambos líderes se saludaron “cordialmente”, no se ha concretado un encuentro formal.
Milei es cercano al expresidente brasileño Jair Bolsonaro, a quien invitó a su toma de posesión un día después de su victoria electoral.
Las tensiones persisten, aunque ambos gobiernos continúan colaborando en temas como la extradición de fugitivos relacionados con el ataque a los tres poderes en Brasilia en 2023, un episodio que ha complicado las relaciones bilaterales.
Lula ha instado a Argentina a cooperar en la detención y posible extradición de estos fugitivos, buscando una solución diplomática a este delicado asunto.
La situación se mantiene en desarrollo mientras Brasil sigue procesando a los responsables del mencionado ataque, condenando a varios de ellos por delitos graves como golpe de Estado, con penas significativas.