La milpa maya es un sistema de cultivo que tiene el riesgo de desaparecer, ya que la mayoría de las personas que se dedican a su preservación son adultos mayores de los pueblos originarios.
Las nuevas generaciones tienen poco interés en replicar este método ancestral de autocultivo, así lo advirtió el titular de Recursos Naturales del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY), Miguel Ángel Fernández Barrera.
El especialista explicó que los jóvenes no están interesados en dedicarse al sector primario de la producción, porque buscan mejores ingresos. En tal sentido, la milpa deja de ser una de sus últimas opciones.
Fernández Barrera recordó que prácticas de los conocimientos ancestrales como la milpa maya no solo son un motor que impacta la economía local y la seguridad alimentaria, sino que al mismo tiempo tiene efectos en los sistemas agrícolas para combatir los evidentes impactos del cambio climático, fenómenos tales como las intensas sequías que contrastan con temporadas de abundantes lluvias y cada vez más frecuentes periodos de ciclones tropicales más numerosos o intensos.