Consciente de que está a menos de 20 días de que inicien los Juegos Olímpicos de París 2024 y de las expectativas de medalla que recaen sobre él, Osmar Olvera se despidió del país junto a sus familiares y patrocinadores y aseguró que más allá de pelear por un podio, buscará el metal dorado en su segunda participación olímpica.
Luego de una breve participación en una de las carreras planeadas para este domingo en el Hipódromo de las Américas en donde el clavadista premió al caballo ganador, Osmar habló del cambio que percibe de Tokio 2020 a Paris 2024. “Llego totalmente diferente a estos Juegos Olímpicos en comparación a lo que pasó en Tokio, antes no me conocían, era la sorpresa por ser el más chico de la delegación en aquel entonces, pero fue una experiencia muy buena para mi.
“Ahora para París fue muy bueno ya contar con esta experiencia olímpica previa, además de llegar como campeón panamericano, mundial y llegar con todos estos resultados atrás me dan una mejor confianza y seguridad de que lo puedo lograr”, agregó.
Además de los deseos que tiene como atleta de poder subirse a lo más alto del podio y poder entonar con orgullo el Himno Nacional Mexicano, el clavadista de 20 años de edad también es consciente del trabajo mental que hay que realizar para no perder el rumbo en una justa deportiva tan importante como lo son Juegos Olímpicos.
“Yo lo vengo trabajando desde hace mucho tiempo con mi psicóloga. Es algo que desde antes de Tokio lo hemos trabajado y en cada sesión le damos el enfoque correcto para sacar toda esa presión innecesaria para no tenerla a la hora de la competencia”.
Sergio Olvera, padre de Osmar, le dedicó unas palabras a su hijo al recordar una pequeña anécdota de cuando era pequeño, sobre el momento en el que decide partir a Jalisco para continuar su preparación deportiva, en donde recordó que Osmar dijo que “él se le pondría al tú por tú con los chinos”.