Cultivos. Las alcaldías Magdalena Contreras, Álvaro Obregón y Cuajimalpa, tuvieron una producción de 91 toneladas de miel y mil 283 toneladas de amaranto, siendo el cuarto productor nacional.
Foto: Cuartocuro | Cultivos. Las alcaldías Magdalena Contreras, Álvaro Obregón y Cuajimalpa, tuvieron una producción de 91 toneladas de miel y mil 283 toneladas de amaranto, siendo el cuarto productor nacional.  

El amaranto, la miel, mole y los nopales ahora están protegidos a través de la marca “Emblema de la Capital”, por lo que la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) local deberá impulsar su promoción en los pequeños y medianos negocios.

En días pasados el titular de la Sedeco, Fadlala Akabani, presentó la marca “Emblema de la Capital”, avalada por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial hasta el 2033, a fin de impulsar productos locales para el fortalecimiento de la economía y la identidad cultural de los productos originarios.

Este miércoles se publicó en la Gaceta Oficial que dicho distintivo no sólo está protegido, sino que deberá usarse para promover la competitividad de las MiPyMes, al incentivar el consumo de productos originarios a través de una estrategia de identidad local.

De acuerdo con la Secretaría de Pueblos y Barrios Originarios y Comunidades Indígenas Residentes de la Ciudad de México, el 59 por ciento de la entidad se clasifica como zona rural, sobre todo las alcaldías: Álvaro Obregón, Cuajimalpa, La Magdalena Contreras, Milpa Alta, Tláhuac, Tlalpan y Xochimilco.

En Milpa Alta, Tláhuac y Xochimilco se producen alrededor de 194 mil 751 toneladas de nopal y un valor de producción estimado en 671 millones de pesos, lo que constituye el 22.4 por ciento del total a nivel nacional, posicionándose como el segundo mayor productor de nopal en el país.

Además, la principal fuente de ingresos para el 90 por ciento de los residentes de San Pedro Actopan es la producción de mole, al ser una actividad económica fundamental con un gran potencial turístico.

Las MiPyMes de la Ciudad pueden solicitar el uso de la marca “Emblema de la Capital” si demuestran que su actividad económica se dedica a la producción y/o transformación de productos alimenticios como amaranto, miel, mole y nopal.

Akabani destacó que este distintivo juega un papel esencial al garantizar la calidad, autenticidad y protección de los productos que ahí se generan.