El panorama gris, catastrófico y desesperanzador sobre el futuro del medio ambiente parece inminente, pero Alejandra Cervantes Mascareño, directora del Papalote Museo del Niño, cree que existen alternativas que se pueden plantear a los más pequeños.
“De poco nos sirve hablar de lo que puede ser mañana si no hablamos de lo que podemos hacer en el presente y en medio de los efectos del calentamiento global que vivimos todos, es necesario abordar el tema”, dijo Mascareño en entrevista con este medio.
Asimismo, la funcionaria del museo interactivo aseguró que a pesar de que la sustentabilidad es un tema que le concierne a toda la humanidad, para los niños tiene gran relevancia.
“En las escuelas, el tema del cuidado ambiental está muy presente y aunque es abordado como una realidad, mucho de lo complejo que esto implica, se ve simplificado para atender lo práctico.
“El consumo consciente es importante reflexionarlo y estas generaciones lo han entendido bien, por eso es común que los niños tengan preocupación por qué tipo de productos compran sus papás y también sobre cuestiones que tienen que ver con separar la basura y el reciclaje“, continuó.
Por ello, aseguró que abundar en estos temas de maneras didácticas y que propongan a los niños un aprendizaje más allá del escolar, puede reforzar hábitos.
“Los niños son esperanza y hay que verlos así, hay que procurar que el planeta que les vamos a dejar pueda tenerlos tanto a ellos como a sus futuras generaciones, mostrarles las cosas que pueden hacer para que no lo sigamos deteriorando”, añadió.
INICIATIVA CON OBJETIVOS
En ese sentido, el Papalote Museo del Niño presenta la exposición temporal Ruta 5Rs, la cual explora a través de información e interactividad los conceptos de Reducir, Reutilizar, Readaptar, Reciclar y Reintegrar, por eso el título.
Esta iniciativa está integrada por objetos mismos que estaban dedicados a convertirse en basura y que hoy sirven como material didáctico de aprendizaje, tal como lo son botellas de PET de diferentes tamaños, latas, prendas de vestir, desechos electrónicos y hasta cartón.
“La idea es mostrar que con esos mismos objetos podemos hacer algo más útil que tirarlos a la basura para que contaminen”, aclaró la funcionaria.
De esta manera es como cerca del 80 por ciento de la museografía de la muestra transforma los desechos en personajes y hasta un instrumento musical hecho de tubos de PVC, chanclas, garrafones de plástico y una rueda de bicicleta, que recibe el nombre de Chanclófono, realizado por las manos de la Orquesta Basura.
La exposición busca llegar a la mayor cantidad de personas posibles, por ello, recorrerá otros lugares al interior de la República.
“Este tipo de experiencias debe llegar a la mayor cantidad de gente posible y después de estar en el Papalote Museo del Niño Chapultepec, irá al de Cuernavaca, posteriormente al de Monterrey y por ahora estamos en pláticas con otros museos interactivos que no son precisamente el Papalote para que también pueda llegar a ellos”, finalizó.
Ruta 5Rs, ya está en el Papalote Museo del Niño.