La presidenta de Perú, Dina Boluarte, investigada por la fiscalía por unos relojes de lujo que no declaró en sus bienes, aseguró en un mensaje a la nación que ni ella ni su gobierno son corruptos, aunque evitó referirse al llamado Rolexgate.
Boluarte habló por cinco horas desde el Congreso en medio de la protesta de decenas de manifestantes que marcharon contra su gobierno en las afueras de la sede del Legislativo, en el centro de Lima.
“Fuera Dina y Congreso corrupto”, se leían en algunos carteles de los manifestantes.
Sin mencionar la investigación que enfrenta en la fiscalía desde marzo, Boluarte hizo una cerrada defensa de la transparencia de su gobierno.
“¡Ni esta presidenta, ni ninguna de nuestras ministras y ministros, están involucrados en actos de corrupción! ¡Y no los tendremos, porque los ministros han jurado a sus cargos bajo un compromiso claro, y porque esta presidenta no los tolerará!”, sostuvo.
Boluarte, de 62 años y quien asumió el poder el 7 de diciembre de 2022 tras la destitución y arresto del entonces mandatario, Pedro Castillo, indicó que su gobierno está “comprometido en una lucha firme y decidida contra la corrupción”.
La mandataria solicitó a los peruanos vigilar y denunciar cualquier hecho irregular y de manera inmediata para que las autoridades tomen acciones drásticas.
La presidenta es investigada por la fiscalía en el caso Rolexgate desde marzo por “cohecho pasivo impropio”, un delito que implica recibir beneficios indebidos por parte de funcionarios.