La Casa Blanca reveló que Estados Unidos confía en prevenir una escalada en la guerra entre Israel y Hezbolá, a pesar de un ataque con cohetes en los Altos del Golán, que provocó la muerte de 12 niños.
Tras el ataque, funcionarios de EU e Israel mantuvieron diálogos a “varios niveles”. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, afirmó que el riesgo de una guerra total se exageró.
Además, añadió que las predicciones de una “guerra total” en los últimos 10 meses fueron exageradas, y la situación actual no es diferente. “Nadie quiere una guerra más amplia, y confío en que podremos evitarlo”, afirmó.
Benjamin Netanyahu, primer ministro israelí, prometió dar una “respuesta dura”, tras el atentado en Majdal Shams, el cual Israel y EU atribuyen al grupo libanés, Hezbolá.
Kirby resaltó que los recientes ataques, los cuales provocaron un un incremento en las tensiones de la región, no deberían afectar el alto el fuego en Gaza, donde Israel enfrenta al grupo islamista palestino Hamás.