Don Vicente Osorio es el último huarachero de la Mixteca de Oaxaca.
Su actividad está a punto de perderse por falta de interés de las nuevas generaciones para realizar este oficio y conservar el legado cultural que ha dado identidad en la cultura Ñuu Savi, que significa gente o pueblo de la lluvia.
Don Vicente –como es conocido en Huajuapan– es originario del barrio de San José o de Los Chirundos, porque los curtidores de piel o huaracheros trabajaban a orilla del río Mixteco, con sus pantalones de manta y sin camisa.
En la Mixteca, “chirundo” se le dice a quien está semidesnudo, por eso esta palabra sirvió para denominar a quienes aquí habitaban.
El último huarachero refirió que este oficio le ha permitido dar de comer a su familia y han pasado tres generaciones: su padre don Vicente Osorio y su abuelo Wiliado Osorio, realizaron este arte que ha permitido dar identidad a la región Mixteca, ya que se le conocen como huaraches de suela de llanta.
SE HACEN EN UN DÍA
Él es único huarachero que realiza los huaraches de la delegación del Jarabe Mixteco, los cuales se hacen en un sólo día y tienen un costo entre los 300 y 400 pesos, depende el número del tamaño del pie.
Indicó que “yo soy el último huarachero de Huajuapan y de la Mixteca, conmigo se muere el oficio porque ya nadie más está interesado, muriéndome yo se termina todo esto, hemos hecho varios pedidos para diferentes partes, de hecho, nuestros huaraches se venden en la Ciudad de Oaxaca cerca de la iglesia de Santo Domingo y en Nueva York, Nueva Jersey, (Estados Unidos) pero también en toda la República Mexicana”.
“HASTA QUE EL CUERPO AGUANTE”
Expresó que no hay cansancio en su cuerpo a pesar de tener 60 años de edad, y es que su jornada inicia justo a las 7 de la mañana y termina a las 12 de la noche, como se dice coloquialmente “hasta que el cuerpo aguante”.
Refirió que él se ubica en la calle Vázquez número 22 en el barrio de San José, en Huajuapan, y pueden buscarlo para hacer sus pedidos de huaraches de la Mixteca, los cuales los ensambla en media hora.