Aun cuando no se tienen datos precisos sobre el avance de la recuperación de corales dentro del Parque Nacional Arrecifes de Cozumel (PNAC), en Quintana Roo, con el programa de descanso, la presencia de algunas especies han muestrado una mejora, lo que lleva a mantener estas acciones para lograr, incluso, reducir la carga de visitantes durante ciertos periodos.
Así, en la isla, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) cerrará cinco arrecifes del PNAC, durante agosto y septiembre, especialmente los más visitados en la temporada alta, se trata de: Colombia Somero, Colombia Intermedio, Colombia Profundo, Palancar Cuevas y Palancar Ladrillos, al sur de la isla.
En una declaración reciente, la titular de la dependencia federal en Cozumel, Blanca Quiroga, explicó que estos programas se han mantenido porque se cree que estas pausas ayudan a la recuperación.
Los descansos se dan gradualmente a lo largo del año y se tiene un selectivo de los arrecifes a los que se reducirá el impacto de los visitantes, como por ejemplo en junio y julio descansaron Paraíso y Paraíso Bajo, así consecutivamente se va programando ciertas zonas para cerrarlas durante dos meses en los que se no llevan a cabo tours de snorkel y buceo.
La medida, a decir de la propia funcionaria, ha sido aceptada por los operadores de servicios turísticos, quienes han tomado consciencia sobre la importancia de tener estos periodos de inactividad en algunos arrecifes, aun cuando estos sean de los más visitados, pero a la par de busca no sobrecargar los abiertos.
Además, estos descansos coinciden en agosto y septiembre, con la temporada de reproducción de algunos organismos coralinos, lo que genera un ambiente de tranquilidad, lejos del estrés presentado en algunos de estos corales, y del impacto recibido por el síndrome del coral blanco en 2018 y el blanqueamiento en 2019.
PEGA EL CAMBIO CLIMÁTICO
El calentamiento global, cambio climático y aumento de la temperatura del agua han detonado que el sistema arrecifal mesoamericano, la segunda barrera de coral más grande del mundo, sufra una nueva etapa de estrés, dijo Lorenzo Álvarez Filip, investigador de la Unidad Académica de Sistemas Arrecifales del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICML) de la UNAM, en Puerto Morelos.
El Parque Nacional Arrecife de Puerto Morelos pertenece a esta barrera denominada Gran Cinturón de Arrecifes del Atlántico Occidental.
“Esas condiciones han provocado blanqueamiento en el ecosistema por el calor(…) Lo que sucede es que se separan las pequeñas macroalgas que están dentro de ellas y entonces pierde energía y queda transparente”, explicó.
ALERTA DE BLANQUEAMIENTO ANUAL
Esta problemática es grave; se vio no sólo en todo el mar Caribe mexicano, donde las temperaturas se volvieron demasiadas agresivas y provocó mortalidad entre julio y octubre de 2023, sino en los arrecifes de todo el mundo, tiene dimensiones globales, aseguró.
Según científicos de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos (NOAA) y de la Iniciativa Internacional sobre Arrecifes Coralinos (ICRI), los arrecifes coralinos del orbe sufren otro episodio de blanqueamiento coralino.
Estos solían ser poco frecuentes, pero este es ya el segundo de esta magnitud en los últimos diez años y el cuarto desde 1982.
PÉRDIDA CONSTANTE
Álvarez Filip informó que en el caso del Caribe mexicano el fenómeno afectó, en gran escala, a lugares someros con lagunas arrecifales.
Indicó que en las zonas protegidas el mar se calentó muchísimo y produjo una alta mortalidad de la especie cuerno de alce, corales de fuego y de lechuga.
En lugares más profundos, de unos 30 metros, también el paisaje del arrecife era completamente blanco. “Lo que sucede es que en zonas como Puerto Morelos y Tulum está el arrecife y luego la laguna arrecifal”.
“Ahí no se mueve el agua y la falta de movimiento y poca profundidad afectó sobremanera, ya más hondo hay algo de corriente que los refresca; Cozumel y Akumal fueron de los menos afectados”, indicó.