Durante su segunda presentación ante medios de comunicación, Saúl Álvarez y Edgar Berlanga se enfrascaron en una primera guerra de declaraciones, con miras a su combate del 14 de septiembre en Las Vegas y con la promesa de Canelo, de darle al puertorriqueño una pelea que nunca antes ha vivido.
Con palabras altisonantes y mensajes en los que destacó que Edgar no ha enfrentado a nadie relevante en su carrera profesional, el campeón mexicano incluso comparó la pegada de Edgar con la de su propio hijo.
“No voy a tener compasión por él. Dices que pegas pero pegas como mi hijo. Necesitaría 20 Edgar Berlangas para que me den un poco de problemas. No te pego ahorita porque tu dinero se va”, afirmó el tapatío.
Antes de que dicho evento concluyera con diversos conatos de bronca dentro del mismo auditorio en el que el boxeador, Caleb Plant, intentó provocar a ambos peleadores, Berlanga reiteró su intención de no darle misericordia al mexicano al vivir su sueño con esta pelea del próximo mes.
“Este es un deporte de gladiadores. Al final del día va a querer quitarme la vida y yo iré a lo mismo. Esto es un deporte de vida o muerte y tienes que hacer lo que sea para llegar al siguiente nivel”, agregó el puertorriqueño.