El Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), reportó que durante los ocho primeros meses de 2024, los incendios en la Amazonía de Brasil se duplicaron en comparación a los registrados en 2023, lo que marca un nuevo récord en casi dos décadas.
De acuerdo con datos satelitales, entre el primero de enero y el 13 de agosto, se contabilizaron 37.835 incendios. Las cifras arrojan un aumento del 111 por ciento en comparación con el año anterior.
Desde 1998 que el INPE empezó a recopilar estos datos, se destacó que la mayor selva tropical del mundo sufrió hechos similares en el mismo periodo en 2005, 2004 y 2003.
Esta situación generó preocupación entre los habitantes de Manaos, capital del estado Amazonas. Ante la emergencia, el instituto de investigaciones, Fiocruz Amazonia señaló que la población debe utilizar mascarillas con filtro especial, especialmente aquellos con comorbilidades respiratorias.
“Lo que más preocupa este año en relación con los anteriores es que no se sabe con certeza si lo que está sucediendo es una anticipación del período crítico o si, este año, tendremos un período más largo de exposición al humo tóxico, ya que el pico de contaminación en 2023 fue en octubre”, señaló el epidemiólogo Jesem Orellana.
Además de sufrir los incendios, la región también enfrenta una sequía que podría ser más grave que la histórica de 2023. Además, el Pantanal, el mayor humedal tropical del mundo, al sur de la Amazonía, también sufre las consecuencias de los incendios.
Los expertos relacionan estos eventos extremos con el cambio climático, destacando la importancia de la Amazonía y el Pantanal como ecosistemas clave para la biodiversidad global y la regulación del carbono y las temperaturas del planeta.