A 42 días de dejar el cargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador dedicó por vez primera homenaje a los migrantes… sin su presencia.
Este lunes, tras decenas de Mañaneras en las que destacó la entrega y esfuerzo de los mexicanos que viven en EU, y que con el fruto de trabajo han sacado a flote a sus familias y al país, en particular en tiempos de la covid-19, el mandatario mexicano encabezó un homenaje/festival a los “héroes” de su sexenio en el Patio Central de Palacio Nacional pero sin representación alguna de asociaciones de migrantes.
El evento fue dirigido y protagonizado por la Secretaría de la Defensa Nacional, decenas de sus unidades vigilaban la explanada en la que, otros tantos efectivos, mujeres y hombres dejaron el verde olivo para enfundarse trajes típicos para representar, entre otras, las danzas de Los Viejitos, Los Machetes o la Danza del Venado.
En el presídium, el mandatario mexicano saliente estuvo acompañado de su Gabinete de Seguridad: Luisa María Alcalde Luján, secretaria de Gobernación; Rosa Icela Rodríguez Velázquez, secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana; Alicia Bárcena Ibarra, secretaria de Relaciones Exteriores, encargadas de las gestiones políticas alusivas a la migración con el Gobierno de EU.
Además de José Rafael Ojeda Durán, secretario de Marina, y Ricardo Trevilla Trejo, jefe del Estado Mayor Conjunto de la Defensa Nacional, en representación del titular de Sedena, Luis Cresencio Sandoval González, funcionarios federales que se han encargado de contener y/o realizar los “rescates humanitarios” de miles de personas en condiciones de movilidad que intentan cruzar México en pos del “sueño americano”.
Mientras las notas musicales y las presentaciones folklóricas tenían lugar a un costado de los murales de Diego Rivera, y ante un López Obrador sonriente, y una secretaria de Gobernación que cantaba cada pieza que se sabía, unos cuantos adultos mayores que se presentaron como migrantes gritaban porras a favor del que, para varios sectores de mexicanos “es el mejor Presidente de México”.
Pese al cariño y entusiasmo de los migrantes para ver a López Obrador, se veía difícil por no decir complicado que los recibiera, en lo que va de su Gobierno no se ha reunido con asociaciones de migrantes, ni en México ni en Estados Unidos, las veces que ha ido.
Lo más cercano que López Obrador como mandatario mexicano y los migrantes fue el 11 de julio de 2022 cuando, desde el balcón del hotel en el que se hospedó en Washington, DC, cuando, a las decenas de mexicanos que buscaban saludarlo desde la calle, él respondió “venimos a defenderlos” para después de un rato, entrar a su habitación.
En esa ocasión como este lunes al interior de Palacio Nacional se escuchó “México, Lindo y Querido” pero entonado por separado; en aquel año, por los paisanos que fueron a ver a López Obrador sin que éste se uniera a ellos; hoy, los militares se la cantaron al saliente Presidente pero sin una voz migrante.
LDAV